El 20 de junio el BOE ha publicado la resolución por la cual el Ministerio de Fomento abre el trámite de información pública del proyecto de ampliación de la A-62 entre Cigales y Simancas, que contempla el soterramiento parcial de la autovía en la travesía de Simancas.
Analizada la documentación colgada en la sede electrónica de participación ciudadana del Ministerio, la Plataforma vecinal Humanizar Simancas ha comprobado que sus líneas maestras coinciden con los borradores que se habían conocido hace meses "y por ello nos reafirmamos en que no cumple con los estándares medioambientales y de calidad que son exigibles a una vía transeuropea".
Desde la Plataforma esgrimen los siguientes argumentos:
a) El soterramiento de la travesía de Simancas es incompleto, dejando en su centro una abertura de 106 metros que constituirá una fuente de ruido y contaminación atmosférica en el centro del casco urbano de Simancas, de forma que se van a vulnerar las normas europeas sobre calidad medioambiental, por lo que España podrá ser sancionada. Denunciamos la incoherencia del partido al que pertenece el Ministro de Fomento, D. José Luis Ábalos, que al mismo tiempo que exige el cumplimiento de la normativa europea contra la contaminación por el tráfico en el centro de Madrid tiene un Ministro que apuesta por incumplir esa misma normativa en Simancas y como diputado nacional por Valladolid al responsable directo de esta tropelía, D. Javier Izquierdo, que no ha tenido el valor de cumplir su promesa de presentar a los ciudadanos de Simancas el proyecto de la A-62;
b) Esa abertura tiene solamente por objeto que el trazado cubierto del túnel no exceda de 500 metros y así ahorrarse la mayor parte de las medidas de seguridad obligatorias para abaratar la construcción, lo que resulta gravísimo en una vía trans-europea que soporta un tráfico de más de 40.000 vehículos diarios, según los propios datos de Fomento, incluyendo un porcentaje significativo de tráfico pesado y mercancías peligrosas.
c) El túnel previsto, carente de las medidas de seguridad necesarias, estará en pendiente y en curva, con los carriles laterales muy próximos a muros de separación y escasa visibilidad. Tendrá un nivel de peligrosidad tal que el propio proyecto contempla que la velocidad máxima del tráfico en el túnel sea de 70 kms/hora. Se ha diseñado a conciencia un futuro punto negro, una auténtica ratonera sin medidas de seguridad para el caso de accidente.
d) Además para su construcción se prevén unos gigantescos desmontes junto a Simancas que se llevarán por delante construcciones históricas del siglo XVI vinculadas al Archivo de Simancas.
e) Finalmente una obra de este tipo supondrá colapsar la autovía A-62 entre Valladolid y Tordesillas durante casi dos años, sin que se hayan previsto alternativas reales para el tráfico. Con ello se pondrá al límite durante muchos meses la calidad de vida de los habitantes de Simancas, de Tordesillas y de los demás municipios que dependen de esta vía de comunicación con Valladolid, así como la de los miles de usuarios habituales de esta autovía.
Por todo lo anterior la Plataforma “Humanizar Simancas” comparecerá en el procedimiento de información pública para hacer alegaciones, "esperando que el Gobierno demuestre algún atisbo de sensatez y corrija este despropósito".
Además, piden al Ayuntamiento "que estudie atentamente el proyecto hecho público y cambie su posición, emitiendo un informe negativo dentro del plazo de un mes que le ha concedido el Ministerio".