Miles de personas queman tristezas y lanzan deseos al fuego de San Juan
Es una noche única, la más corta del año, y rodeada siempre de un aura especial que la convierte en mágica para muchos. Esa sensacion se incrementa con el fuego de la hoguera, inmensa y que irrumpe en la noche con el crepitar de las llamas. A ella se lanzan (metafóricamente) las tristezas para que el fuego se las lleve, los suspensos y la mala suerte, pero también se convierte en pozo de los deseos y las peticiones más diversas.
La noche de San Juan ha reunido en Valladolid a miles de personas en la playa de las Moreras, que se ha vuelto a convertir en el lugar de reunión y celebración a orillas del pisuerga con una completa programación marcada por la música.
Tras la fiesta, el intenso dispositivo de limpieza ha logrado que a primera hora de la mañana de este lunes esta amplia zona junto al río presentara un aspecto impecable, como si nada hubiera pasado horas antes.