Efectivos de la Guardia Civil han desactivado una granada de mortero de la Guerra Civil hallada en una vivienda de Megeces mientras una persona realizaba tareas de limpieza en la misma.
La granada, de calibre 45 y con carga explosiva activa, la encontró el familiar del propietario de la vivienda --ya fallecido-- mientras realizaba tareas de limpieza en la bajo cubierta de la casa, por lo que avisó del hallazgo a la Guardia Civil.
Hasta el lugar del suceso se desplazó el equipo de Desactivación de Explosivos de la Guardia Civil de Valladolid que, tras inspeccionar la granada, comprobó que era de calibre 45, modelo Breda Brixia y con su carga explosiva activa.
Así, se procedió a su retirada a un lugar seguro para su completa desactivación mediante medios y técnicas propias de la especialidad, han informado a Europa Press fuentes de la Guardia Civil, que ha incidido en la "extrema peligrosidad" de estos artefactos, a los que si no se somete a ninguna acción permanecen en estado "latente", pero en caso de cualquier manipulación, por pequeña que sea, el resultado más probable es la explosión.
En muchas ocasiones existe un exceso de confianza debido al aspecto deteriorado del artefacto por la acción del óxido y el paso del tiempo, pero es necesaria la reiteración de que la mayoría tienen intacta su carga explosiva y son muy peligrosos.
Importante no tocar
Por ello, si alguna persona tiene contacto con algún objeto que despierte sospechas de ser un artefacto explosivo se recomienda no tocar, mover ni alterar en modo alguno el objeto, señalar el lugar para poder reconocerlo posteriormente y dar aviso a la Guardia Civil por los medios que permitan mayor rapidez.
En el caso de que alguna persona encuentre en su domicilio algún objeto que considere peligroso se aconseja lo primero dar aviso a la Guardia Civil, que ha recordado que la atención de estas incidencias es prioritaria y no se debe temer ningún tipo de sanción.
De la misma forma, se desaconseja "totalmente" transportar el objeto hasta un lugar apartado y abandonarlo allí ya que, además del peligro inherente al transporte, se abandona un objeto peligroso a una situación descontrolada, de forma que se incrementa el riesgo al poder sufrir acciones que le hagan explosionar.
Igualmente, la Guardia Civil ha recordado que estos artefactos no explosionan espontáneamente si no se les somete a alguna acción, como la manipulación o fuego, por lo que, ante su hallazgo, hay que mantener la calma y seguir las recomendaciones dadas.