ANPE ha presentado este miércoles los datos sobre el número de actuaciones que la figura del Defensor del Profesor del sindicato educativo ha tenido que afrontar durante el curso 2018/2019 y que han llegado a 81 con un aumento de siete en comparación con el curso anterior.

La nueva Defensora del Profesor de ANPE, María José Martín Vicente, ha recalcado que el aumento se debe principalmente a problemas relacionados con el entorno laboral y con los padres y madres, ya que los que tienen que ver con el alumnado han descendido.

En números totales, los primeros han llegado a 27, con un aumento de diez en Castilla y León. En concreto, los problemas con los compañeros han sido siete (+4), con los equipos directivos quince (+4) y con la administración cinco (+2).

En cuanto a los padres y madres han llegado a 28, siendo la parte más importante el acoso de padres con diez (+5), seguido de las amenazas con siete (+4). Han descendido por su parte la denuncia de padres en tres hasta los seis y la agresión física en uno hasta cinco.

Los alumnos, por último, han influido en 26 de los casos, aumentando las amenazas en cinco hasta los seis y el acoso en uno hasta los cinco. Descendieron, por su parte, las agresiones en siete casos hasta los seis, el ciberacoso en uno hasta cinco y los problemas para dar clase por faltas de respeto o disciplina en uno hasta los siete.

En la comparación por provincias, donde ocho de los casos no están disponibles por mantener el anonimato, Valladolid fue donde más se produjeron seguido de Burgos y León, con 23, 11 y 10, respectivamente, y aumentos de 7, 5 y 3 casos. Por debajo de estos números se encuentra el resto como Salamanca (8 y +2), Zamora (7 y -2), Segovia (6 y +4), Palencia (4 y -5) Ávila (3 y -5) y Soria (1 y -2).

Por sexos, además, la mayoría se dieron en el femenino (62), mientras que el masculino apenas supuso 19 casos. Pese a ello, eso sí, Martín Vicente, le restó importancia al ser un sector donde las mujeres son más numerosas.

Por último, el número aumentó en todas las etapas educativas salvo en las enseñanzas especiales, de idiomas o conservatorios, donde descendió en el conjunto en dos. De esta manera, en Infantil hubo dos casos más; en Primaria, uno; en Secundaria, dos; y en Formación Profesional, cuatro. Primaria (32) y Secundaria (29) son las etapas en las que más problemas se produjeron.

"El número es superior"

Los presentes en la rueda de prensa de presentación de este informe, que se presenta anualmente, también recalcaron que estos datos son los que llegan al Defensor del Profesor de ANPE, una mínima parte en comparación con los que se producen en realidad.

De hecho, aunque en este año todavía no se ha publicado, la Consejería de Educación recoge a través de su Observatorio, el número de problemas surgidos en las clases de diversa índole, que en el curso 2017/2018 llegaron por encima de los 3.000, a un 10% del profesorado.

Preocupante aumento

Tanto en el caso del informe de ANPE como en los datos de la Consejería, el aumento es "preocupante" para el sindicato. "Es significativo que hayan aumentado los casos. Estos números van a influir en la dinámica de un centro educativo", recalcó la presidenta del sindicato, Pilar Gredilla.

Los casos que expuso ANPE, además, se traducen en la mayor parte de los casos en situaciones de ansiedad, estrés, depresión o, incluso, en baja, algo que se debe superar porque afecta al futuro del país, como recalcaron.

Posibles causas

Desde el sindicato hablaron también de las posibilidades del aumento de los casos con los padres, por ejemplo, que "se traduce por la situación que estamos viviendo en la sociedad", según expuso la Defensora del Pueblo. "Hay un cambio de valores e influye muchísimo. Se premian determinadas conductas y los jóvenes son vulnerables. El que más grita es el que más éxito tiene. Y los padres son hiperprotectores de sus hijos", afirmó.

Esto también puede provocar el descenso en los problemas con los alumnos, ya que "los padres están tomando las riendas, están tomando un papel relevante", mientras los alumnos cuentan con consecuencias.

Preocupante son casos en los que incluso se producen agresiones de padres a profesores delante de sus hijos, como comentaron, e instaron a estos a que trasladen una buena percepción de los profesores en casa, como ocurre en mayor medida en las zonas rurales frente a las urbanas.

Soluciones

Desde ANPE, además, hablaron sobre posibles mejoras para evitar estos casos como la reactivación del Observatorio de Convivencia Escolar o programas de prevención y planes específicos de formación del profesorado en la detención de conflictos.

Por otro lado llamaron a un compromiso para el tratamiento de rehabilitación de los alumnos agresores, así como el reconocimiento de la ansiedad, el estrés y la depresión como enfermedades profesionales si proceden de problemas internos en el centro educativo.

Recordaron, asimismo, que existe un protocolo en Castilla y León que se pone en marcha con asistencia jurídica y psicológica a través de una llamada al 012.