La villa de Cigales, situada entre un mar de viñedos y campos de cereal en el valle del Pisuerga, se encuentra a 12 km. de Valladolid y poco más de 20 km. de Palencia perfectamente comunicada por la Autovía A-6; lugar de nacimiento de ilustres personajes como la Emperatriz y Archiduquesa Ana de Austria, el Corsario Pedro Niño o el ilustre obispo de Guadalajara (México) Fray Antonio Alcalde; tierra de vinos y bodegas centenarias.
Cigales se presenta en Intur con una nueva campaña de promoción turística que se desarrollará a lo largo del próximo año bajo el lema ‘Descubre Cigales, un placer para los sentidos’ ya que Cigales es una villa que se puede conocer y visitar con los cinco sentidos. Paisajes infinitos ante nuestros ojos de cepas centenarias, Senderos del Clarete, cauces de agua, páramos y vaguadas desde los cuales se alzan orgullosas las dos torres de la Iglesia de Santiago Apóstol de Cigales, los colores del vino, siglos de historia ante nuestros ojos, mitos y leyendas, personajes históricos que dejaron su huella por las calles de la villa.
Conocer Cigales a través del paladar es todo un placer para los sentidos. Descubre los sabores y texturas de nuestros productos enogastronómicos, vinos y orujos, las afamadas morcillas de la Maruja y cómo olvidar el tradicional lechazo asado en horno de leña y el pan de pueblo de toda la vida.
Viaja a través de los aromas, desde los frescos, afrutados y florales vinos rosados hasta los potentes y especiados vinos tintos, la esencia de los mostos en época de vendimia, el incienso durante la Semana Santa o el aroma de los tradicionales asados en horno de leña nos acercarán a descubrir esta histórica villa.
Siente con tus propias manos Cigales, el tacto de la fría piedra de la Catedral del Vino o los depósitos de las bodegas, la delicadeza de las barricas de madera y escabrosas viejas vigas de lagares centenarios, el cascajo, la tierra y las viñas centenarias de Cigales, el agua de los arroyos, el río Pisuerga y el Canal de Castilla o el tacto de las uvas en sus diferentes fases de maduración. Pero también podemos escuchar Cigales para conocer su historia a través de las visitas guiadas desde la Oficina de Turismo, el sonido del paloteo que evoca tiempos de tradición y folklore o el bullicio de las Fiestas de la Vendimia y Santa Marina sin olvidarnos de los sonidos del vino desde el momento que descorchamos la botella y servimos la copa hasta brindar con ella.