El escritor vallisoletano David Acebes ha recibido en Valencia la Pluma de Plata al Mérito Literario que concede el Ateneo Blasco Ibáñez y en cuya gala recogió también, en este caso la Pluma de Oro, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig.
En la edición de 2019, el jurado ha reconocido en la categoría de poesía a David Acebes con el primer premio; a Jesús Moreda, con el segundo, y a Héctor Rico, con el tercero. En la categoría narrativa, ha obtenido el primer premio Antonio Prima; el segundo, Hasbia Mohamed Aomar, y el tercero, Ana Fernández de Córdova.
En la edición de 2020 han sido premiados con la Pluma de Plata en la sección poética Manuel Giménez, con el primer premio; Fernando Robles, con el segundo, y Encarna Beltrán-Huertas, con el tercero, mientras que en la modalidad de narrativa el primer premio lo ha obtenido Luis Auñón; el segundo, Norma Graciela González, y el tercero, Antonio Manuel Lucena.
Durante el acto, celebrado el miércoles en la capital del Turia, Ximo Puig invitó a recuperar la "mirada esperanzada y de progreso" con la que Vicente Blasco Ibáñez "ilusionó a todo un pueblo", porque, como este valenciano universal enseñó con su obra, "sin propuesta de transformación, la denuncia social se queda coja".
"Esta es una lección blasquista que hemos de recordar quienes tenemos una función pública: crítica y propuesta, denuncia y acción; así se cambia el presente; así se gana el futuro", manifestó el presidente valenciano, quien destacó la importancia que tiene el trabajo de los escritores como forma de "tomar conciencia del mundo" real y el que "entre todas y todos" se pretende "construir".
Trabajo "insustituible"
Asimismo, trasladó a las personas premiadas el mensaje de que su trabajo "es insustituible". "En la era de la robótica, los algoritmos y los saltos tecnológicos no hay nada que pueda suplantar la función de la literatura", recalcó el presidente, que expresó que la visión humanista que aportan estas obras "es necesaria para alimentar el espíritu".
Aprovechando la entrega de los premios que llevan el nombre de Blasco Ibáñez, el presidente recordó que el escritor valenciano era "un hombre de acción" que "no se limitaba a la contemplación ni la queja".
En este sentido, afirmó que "sus libros no eran sólo una crítica social, desde el naturalismo, hacia una realidad injusta", sino que "iban más allá y aportaban propuestas transformadoras".
"El autor de 'La barraca' no solo tenía una pluma brillante y una oratoria excelente", sino que "conectó tan bien con la ciudadanía de su tiempo porque fue capaz, sobre todo, de infundirles esperanza en una realidad distinta y más justa", defendió el presidente. "Frente al miedo, confianza; frente al pesimismo, esperanza; frente al grito, palabra", subrayó Puig.