La Asociación La Empalizada organizó su XIII edición de jornadas taurinas, y de nuevo acertó en la elección de los personajes en el formato entrevista-conversación donde hubo sinceridad y complicidad entre ambos protagonistas.
Un veterano Federico Arnás fue mostrando el camino -sin bajar mucho “la muleta” al principio- al joven torero Ginés Marín, quien ofreció todo un repertorio de saber estar, madurez, formación y sinceridad. Entre ambos fueron descubriendo facetas desconocidas a un público que, sencillamente, se lo pasó en grande.
Tanto el periodista como el torero ofrecieron una tarde noche muy entretenida, donde ambos disfrutaron en una conversación que trascendió a la sala. De eso se trataba y lo consiguieron.
Tras la presentación de los invitados por parte de Raúl Redondo, alma mater de la entidad (que no olvidó a su amigo “Fisi”), se exhibió un vídeo bien elaborado donde se mostró la actividad del periodista con su equipo, y algunas de las faenas más importantes del torero en sus cinco años de alternativa.
Marín vino acompañado de su nuevo apoderado, Jacinto Ortíz (propietario de la plaza de toros de Olivenza) y del ex matador de toros Antonio Manuel Punta, ahora ejerciendo de subalterno de confianza del diestro jerezano.
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Por su parte, Arnás vino acompañado de su esposa y de sus amigos y vecinos Ángeles y José María; una pareja con raíces en Montemayor.
Ángeles Sánchez, ahora taquillera en Las Ventas, fue precisamente la “apoderada” culpable de que Arnás “se anunciase” en el cartel. José María Gutiérrez Cuéllar, su esposo, fue alcalde de Montemayor en los años 90.
Ambos, una deliciosa pareja de los que te entregan su amistad de por vida.
En definitiva, una agradable velada la que pasamos y disfrutamos con las buenas gentes de La Empalizada y su núcleo principal: María José, Gema, Diego, Javi y el consabido Raúl. De sus ideas surge una excelente puesta en escena con detalles de todo tipo, incluidas unas divisas que aportó elpequeño Gonzalo, hijo de Gema. Sin olvidar a Gabriel Sanz, el hombre de la luz y el sonido que aporta su saber de forma altruista. En fin.
Susi (La Martina) hizo entrega de sus memorables magnum personalizados.
Y los invitados casi necesitan un remolque ante la ingente cantidad de productos de la tierra con los que fueron obsequiados. Generosas las gentes de La Empalizada.
Entre los invitados, rostros conocidos como el pintor y escultor cuellarano, Alfonso Rey, quién cede algunas de sus obras a la asociación para estas jornadas, además de tener un detalle escultórico con los protagonistas. Y el alcalde de Montemayor, Iván Velasco quien no quiso perderse el acto.
Saludamos a Rubén Ramiro, socio destacado de la peña Taurina Palentina que sumó al acto, en una especie de hermanamiento e intercambios entre entidades taurinas.
Tras el acto se sirvió un generoso aperitivo a los asistentes al acto para, posteriormente y en pequeño comité, saborear y disfrutar de la cena en La Martina, donde Susi y Carlos estuvieron a la altura esperada.
A saber, de entrantes: Cecina con trompetilla caramelizada, calamares de La Martina, mejillones escabechados y patatas revolconas, con su torrezno incluido.
De segundo ofrecieron merluza o entrecot.
Y de postre naranja con azúcar y canela con bola de helado artesanal. Delicioso, como suele ser habitual en este emblemático establecimiento.
Un tinto de nuevo cuño de la zona de Tudela fue distinguido por Susi y uno, como viene siendo habitual, una copita de rosado y gaseosa porque había que volver a Pucela en las debidas (y no bebidas) condiciones.
Y el próximo sábado 7 de marzo volveremos a Montemayor para dar cuenta de la última jornada, que se presume también interesante. Participarán el torero ledesmino Domingo López Chaves, el ganadero Joaquín Moreno Silva (Saltillo) y Nacho de la Viuda, gerente de Tauroemoción. Modera Juan García Tejedor de Cope Valladolid.
Y entre los asistentes podremos disfrutar de la compañía de mi amigo Ignacio López Chaves, primo carnal del torero, un ganadero charro de estirpe legendaria. Buena gente.