El servicio de autobuses urbanos de Valladolid (Auvasa) prohíbe el pago con efectivo en sus autobuses, a los que se podrá acceder únicamente por la puerta trasera, ya que se precintará una zona de seguridad en torno al conductor a fin de evitar la expansión del Covid-19.
No obstante, los usuarios deberán seguir validando sus títulos de viaje, según ha indicado la propia empresa a través de un comunicado remitido a Europa Press, en el que asegura que "centra todos sus esfuerzos en garantizar las medidas de protección necesarias de sus conductores que son el garante fundamental para asegurar los ciudadanos puedan acceder a sus puestos de trabajo y los servicios básicos en caso de ser necesario, como exhorta el Real Decreto 463/2020 por el que se declara el Estado de Alarma".
Esta medida entrará en vigor el lunes 16 de marzo de 2020 y se prorrogará por tiempo indefinido hasta nueva orden pero, hasta el martes, 17 de marzo, se permitirá el acceso gratuito a los viajeros que no dispongan de otro título de viaje válido. A partir del 18 de marzo ningún viajero sin título de viaje válido en soporte de tarjeta será admitido en el autobús.
Con objeto de garantizar las mejores condiciones sanitarias en el contexto actual, se ha mantenido la oferta. Este hecho, unido al importante descenso de demanda provocado por las restricciones generales de movilidad impuestas por el Estado de Alarma, evitan las aglomeraciones en el transporte público.
Además, Auvasa asegura que la "escrupulosa" desinfección que se realiza periódicamente hace del autobús "uno de los transportes más seguros de la ciudad en estas condiciones", si bien se ruega a la población que no hagan uso del mismo si no es "estrictamente necesario". Con el ánimo de conciliar ambos intereses, Auvasa también ha distribuido material de autoprotección para sus conductores.
Asimismo, se dispondrá de un precintado desde la actual canceladora hasta la primera fila de asientos del lado donde no va el conductor con carteles informativos para los viajeros indicando que deben validar el bono transporte o, de tratarse de un bono personal, mostrárselo al conductor.
De este modo, los viajeros con bonos personales deberán mostrar el título de viaje al conductor que anotará un registro de viaje con este tipo de bono, mientras que los viajeros en posesión de un bono no personal deberán validarlo en la canceladora sin traspasar el precinto que se habrá acondicionado.
Se llevará a cabo también una implantación gradual de pantallas protectoras provisionales entre la expendedora y la canceladora, de forma que aíslen al conductor del contacto directo con viajeros.
En los vehículos que tengan instalada esta pantalla se eliminará el precinto de seguridad del conductor que ya estará protegido por una barrera física y el resto de medios de auto-protección. En este caso los viajeros deberán validar sus títulos de viaje tanto personales como no personales en expendedoras y canceladoras.