El portavoz del Grupo Municipal Ciudadanos en el Ayuntamiento de Valladolid, Martín Fernández Antolín, defendió hoy la posición del alcalde de la ciudad, Óscar Puente, que utilizó su amistad con el empresario Sergio Zaitegui, propietario de Zaiglobal Services, para la adquisición de material sanitario como “aval” de garantía para evitar estafas y la compra de epis y mascarillas de calidad durante el confinamiento, dada la experiencia de esta empresa y sus trabajos con el Gobierno vasco.

Fernández Antolín mostró su “extrañeza” por la vinculación que la portavoz del Grupo Popular, Pilar del Olmo, “intentó establecer entre una noticia aparecida en un medio de comunicación digital y un hecho del que los portavoces de todos los grupos conocían desde que las reuniones telemáticas durante el confinamiento”.

Entonces, recordó el portavoz de Cs, todos los concejales expresaron su “preocupación” por la falta de material para poder abastecer, “no ya a la totalidad de la población, sino a los colectivos más sensibles y a los grupos sociales que se demostraba que eran más vulnerables”. “La escasez de este material en el mercado nos llevó a todos, en aquel tiempo, a buscar alternativas que viniesen a paliar la situación y los que tenían contactos lospusieron a disposición del ayuntamiento; el alcalde como uno más”, apuntó Fernández Antolín.

Sobre los presupuestos que presentó el regidor en el marco de la oferta de Zaiglobal Services todos los grupos políticos dieron “el visto bueno”, explicó el portavoz de Ciudadanos, quien recordó que su contacto “era uno más de los que se ponía sobre la mesa y, en aquel momento, se confió en las garantías que ofrecía una empresa que estaba trabajando ya con el Gobierno Vasco en la provisión de material”. De hecho, continuó el edil, “lejos de ocultarlo, el alcalde habló explícitamente de que era un amigo suyo, no sólo alguien a quien conocía, sino a quien podía dirigirse con las máximas garantías cuando se estaban produciendo constantes noticias de estafas en la adquisición de material por incumplimiento en las entregas o en la calidad del material”.

“No veo justo, por tanto, que ninguno de los portavoces que asistíamos a aquellas reuniones se pueda hacer de nuevas acerca de la amistad de este empresario y el señor Puente porque fue el propio alcalde quien la expuso como aval para poder acceder a un material que sabíamos vital”, defendió Fernández Antolín, quien insistió en que “todos” conocían esta relación y se avaló esa compra que “sirvió para que, entre otros, los trabajadores sociales pudieran atender a los mayores o para que la Policía Municipal pudiera velar por la seguridad”. “Insisto: si el germen de la polémica es la adquisición de ese material sanitario, comprometo mi palabra a que los hechos fueron conforme explico”, concluyó.