El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, ha subrayado que su "compromiso" es ser primer edil durante tres mandatos y para ello presentarse como candidato del PSOE en las elecciones municipales de 2023, unos comicios en los que admite que la polarización de la política nacional es "un riesgo", si bien ha recalcado que el equipo de Gobierno que forman los socialistas con VTLP es "bastante moderado".
Así lo ha expresado el regidor vallisoletano en una entrevista concedida a Europa Press en la que ha reflexionado sobre el escenario político que deja la pandemia del coronavirus y cómo puede influir en las elecciones todavía lejanas en 2021, si bien considera que todavía es pronto para decir en qué sentido incidirá.
Puente ha recordado su "compromiso" desde el primer mandato municipal, que es ser alcalde durante tres legislaturas, para lo cual tiene claro que será el candidato del PSOE en las elecciones de 2023 y espera ser elegido para otros cuatro años "con la finalidad de completar proyectos" que le gustaría "dejar terminados".
"A partir de ahí es fiar muy largo. Mi compromiso tenía que abarcar tres mandatos, que era lo que hacía falta para poner en marcha algunas cosas para enfocar un rumbo para mi ciudad, a partir de ahí los acontecimientos irán marcando el futuro", ha apuntado Óscar Puente.
De cara a esas elecciones todavía lejanas, para las que quedan más de dos años, ha reconocido que la "polarización" de la política es "un riesgo" sobre todo si en el escenario de 2023 "la clave nacional influye en exceso en lo municipal", algo que apuntó al ser preguntado a cerca de la posible incidencia de los pactos presupuestarios del Gobierno de España con Bildu y Esquerra Republicana de Catalunya en el voto de centro y centroderecha que Puente reconoce que recibió el PSOE en las elecciones de 2019.
En ese sentido, considera que si dentro de dos años los vallisoletanos el escenario electoral es mayoritariamente "local", sin gran incidencia de asuntos de la política nacional, el PSOE "no solo mantendrá, sino que incrementará" su margen de ventaja sobre otros partidos.
"Como es lógico, y como quieren todos los alcaldes, prefiero un escenario en el que cuando los ciudadanos se pongan ante la urna valoren lo que se hace en su ciudad, el trabajo que se hace en su Ayuntamiento. Es más justo, aunque eso en ciudades grandes como Valladolid no siempre es fácil", ha reflexionado.
En el caso de que la "clave nacional" influya "en exceso" y lo municipal quede "relegado a un segundo plano", señala que "va a depender del escenario en que nos encontremos en las elecciones de 2023, si bien no tiene por qué ser algo negativo para los intereses del PSOE. "Ahora mismo no sabemos el escenario de dentro de dos años, si la pandemia pasa, la recuperación económica se abre camino y si el Gobierno tiene estabilidad a lo mejor la situación política nacional no solo no nos perjudica sino que nos ayuda", ha aventurado.
En cuanto a ese "riesgo" que puede suponer la polarización, el alcalde de Valladolid ha defendido que el Gobierno que conforman su partido y VTLP es "bastante moderado" y ha puesto como ejemplo el acuerdo para los Presupuestos de 2021, en el que ha habido un encuentro "no solo entre PSOE y Ciudadanos, sino entre VTLP y Ciudadanos", ante lo cual ha destacado la "altura política" del "gesto" que ha hecho la plataforma impulsada por Izquierda Unida.
"En el panorama nacional habrá lo que haya pero esta es la ciudad de Valladolid y nosotros creemos que es bueno entendernos en beneficio de la ciudad con una formación política, con la que tenemos poco que ver, en beneficio de la ciudad", ha recalcado.
Gobierno "radical" de PP y VOX
De hecho, ha enfatizado que cambiar este "gobierno del talante y la moderación" por un ejecutivo municipal formado por Partido Popular y Vox, que en su opinión sería la "única alternativa posible" a la actual configuración del Ayuntamiento no tendría "muy contentos con el cambio" a los vallisoletanos.
De hecho, ha apostillado que sería cambiar la actual "moderación y el trabajo con sentido común" de PSOE y VTLP por "un proyecto de involución y radicalización" de PP y Vox, a lo que se ha preguntado si la gente votaría para "frenar una alternativa radical".
Por otro lado, el alcalde de la ciudad se ha mostrado satisfecho con la relación que tiene el Ayuntamiento con el Gobierno de España, con una "buena interlocución" y un "acceso directo a todos los ministerios". Ello, sumado al "peso" que considera que él tiene en el PSOE, "va a ser muy bueno" para conseguir objetivos para la ciudad en los próximos tres años.