La Policía Municipal de Valladolid detectó un total de 63 infracciones tras inspeccionar un total de 104 camiones durante la campaña de vigilancia y control a estos vehículos que se desarrolló la semana pasada, en concreto, del 8 al 14 de febrero
Durante la campaña se realizaron inspecciones sobre este tipo de vehículos (autorizaciones y documentos, condiciones técnicas y elementos de seguridad, etcétera) y sobre sus conductores (permisos de conducción, tiempos de conducción y descanso y consumo de alcohol).
En este sentido, el cuerpo de seguridad municipal a través de su cuenta de Twitter, consultada por Europa Press, indica que entre las sanciones han destacado las relativas a la mala estiba, con un total de 27 sanciones, y a deficiencias técnicas, 23.
La Policía Municipal incidió los días antes de poner en marcha la campaña en que conducir estos vehículos no es igual que conducir un turismo, ya que el comportamiento dinámico es diferente, sobre todo si van cargados, pero además la sujeción de la carga es vital, de manera que cualquier desplazamiento de la misma cambia el comportamiento dinámico del vehículo por desplazamiento del centro de gravedad.
Entre este tipo de vehículos, es más alta la incidencia de salidas de la vía y vuelcos que puede explicarse por la excesiva o mala colocación de la carga, ha advertido.
Además, el riesgo en la conducción de camiones y autocares es mayor que en turismos, debido a la carga que transportan y a un menor equipamiento de seguridad activa y pasiva. Sin embargo la sensación de seguridad por el mayor tamaño del vehículo, menor velocidad y elevación de la cabina hace que el número de distracciones sea mayor y el uso del cinturón de seguridad menor.
Vehículos de transporte
En este contexto, la Policía ha apuntado que pese a que el 68 por ciento del parque de vehículos en España es de turismos, el transporte de mercancías (camiones y furgonetas) tiene un peso importante en lo que a seguridad vial se refiere, ya que representa el segundo tipo de vehículos más numeroso que circula por las carreteras (14 por ciento del total del parque) y están implicados en el 16 por ciento de los accidentes con víctimas ocurridos en el año 2019.
Por su parte, el parque de autobuses representa alrededor del 0,2 por ciento del total del parque automovilístico y está implicado en el 2 por ciento de los accidentes con víctimas.
Este dato, unido a un mayor índice de letalidad en el caso de accidentes con vehículos de mercancías de más de 3.500 kilogramos, lleva a la Dirección General de Tráfico a poner en marcha esta campaña de vigilancia a la que se suma el cuerpo local.
En el año 2019, los camiones de hasta 3.500 kilogramos de masa máxima autorizada se vieron implicados en 1.535 accidentes con víctimas y su incidencia fue similar en vías urbanas (54 por ciento) y en interurbanas (46).
Objetivos
La campaña perseguía garantizar un transporte seguro y fiable en la ciudad de Valladolid con un seguimiento y control que obligue a las empresas de transporte de la ciudad a cumplir con las normas que se les exige para dicha tarea.
Asimismo, se pretendía contribuir a la disminución de accidentes o a reducir decisivamente la potencial siniestralidad que pudieran sufrir y facilitar los datos obtenidos a la Dirección General de Tráfico para su estudio y tratamiento a nivel nacional.
También se intentó evitar con estas inspecciones los transportes ilegales o que no se ajusten a la normativa aplicable y que minan la línea de flotación del transporte nacional.
Finalmente, se trató de reforzar con el impacto mediático su efecto preventivo en la sociedad.