Si alguien pensó que la Convención Nacional del Partido Popular, celebrada ayer 28 de septiembre en Valladolid, serviría para calmar los ánimos dentro del PP municipal, nada más lejos de la realidad. La presidenta del Grupo Municipal del Ayuntamiento de esta formación política, Pilar del Olmo, comparecía hoy ante los medios para explicar las mociones que llevarán al Pleno y dejó muy claro que la situación es de guerra abierta. Tanto que “tal y como está el partido, si hoy me pidieran ser candidata a la Alcaldía de la ciudad, diría que no”.
Una declaración de intenciones a debida “al disgusto de todos los miembros del grupo, en cuya representación comparezco, por la falta de reconocimiento a nuestro trabajo”. Una situación que “vivimos desde el primer día, incluso desde que empezamos a confeccionar la lista” que se presentó a las elecciones.
Según Del Olmo, “ha habido dirigentes que nos han criticado desde el inicio absolutamente en todo”. En ese sentido indicó que “nos han dicho que no conocemos la realidad de Valladolid, que no hacemos oposición o que no tocamos temas, como el soterramiento, la movilidad o las vacaciones del Alcalde cuando llevamos meses trabajando en todo ello”. Eso sí, no quiso hacer más leña y obvio dar los nombres de quienes se muestran más contrarios a su gestión. Solo puso nombres y apellidos a quienes sí les han apoyado “Alfonso Fernández Mañueco y Paco Vázquez”.
Críticas por la espalda
Y lo que peor lleva es que “las críticas siempre se hacen por detrás, nunca nadie me ha reprochado nada a la cara”. Porque consideró que “si me dijeran que es lo que estamos haciendo mal podríamos solucionarlo” ya que tiene muy claro que dentro del partido “puede haber discrepancias que se pueden resolver”.
Aunque no hay un momento que haya querido marcar como detonante de su enfado ante la situación sí que dio alguna pista ya que mencionó, como ejemplo, la Junta provincial celebrada en Zaratán la pasada semana “en la que se agradeció su trabajo hasta al portero que abrió el polideportivo, pero en ningún momento a nuestro grupo”.
Pese a ello, no tiene en mente dimitir como concejala porque “tengo una responsabilidad que cumplir y es evitar que Óscar Puente vuelva a ser alcalde” para así recuperar la Alcaldía para su partido. Una formación “a la que, en política, debo todo y al que también yo he dado parte de mi vida”.
No buscó ser candidata
Tanto que como explicó “yo había decidido no seguir como consejera cuando Herrera dejó el gobierno autonómico y no busque ser candidata a la Alcaldía de Valladolid, sino que fueron ellos lo que me lo pidieron”. Y si la solicitud se repitiera en este momento “tal y como está el partido diría que no”. Incluso añadió que para que variará su decisión “tendrían que cambiar muchas cosas y no creo que vaya a suceder” porque tendría que hacerse a través de un giro de 180 grados en la actitud que se ha mostrado hasta ahora.
En esa decisión pesa mucho su relación con el presidente del PP de Valladolid, Conrado Íscar, con quien manifestó sentirse “decepcionada porque esperaba más de él”. Aún así reconoció que ayer tuvo una reunión “informal con él “en la Convección Nacional del PP, y que han quedado para “que pase a ser formal”.
Del Olmo, que estuvo acompañada en su comparecencia del núcleo duro del grupo municipal, José Antonio de Santiago-Juárez, Alberto Gutiérrez y Francisco Blanco concluyó con un “no” firme respecto a si había pensado en dimitir de su cargo. Una respuesta que, sin embargo, no concretó respecto a su puesto dentro de la ejecutiva del PP de Valladolid en la que ocupa la Secretaría de Política Municipal. “De concejala voy a seguir, dentro de la ejecutiva no lo sé”, concluyó.