La Concejalía de Juventud del Ayuntamiento de Medina del Campo, a través de su Plan de Adicciones, pone en marcha la campaña preventiva ‘Si vas a apostar, apuesta por ti’. Un programa que tiene el propósito de concienciar a la población general y a los jóvenes en particular, que juegan y apuestan con dinero real como otra forma de ocio, sobre los riesgos que implica esta conducta para su desarrollo, apelando a la responsabilidad común.
En este sentido, con motivo de la conmemoración el próximo 29 de octubre del Día Mundial sin Juegos de Azar, se instalará una mesa informativa en la Plaza Mayor por parte de la Asociación Ajupareva, en horario de 10:00 a 19:00h.
La campaña incluye actividades preventivas con la población medinense, los jóvenes de la villa y profesionales, padres, así como personas interesadas en el tema.
En este momento, el Área de Juventud tiene en marcha un curso sobre ‘adicción al juego y otras adicciones comportamentales’, así como charlas en los centros escolares sobre esta temática y charlas informativas para familias.
Enfermedad grave
Esta fecha conmemorativa resulta idónea para recordar que la adicción al juego puede llegar a ser sumamente perjudicial para todos los individuos que la padecen así como para sus familiares, pero también un día para despertar de su letargo a quienes la sufren y recordarles que hay salida, que una vida sin juego es posible.
En la actualidad, los juegos de apuestas constituyen una actividad económica en la que participa, en mayor o menor medida, gran parte de la población; también los adolescentes.
Además de la propia dimensión económica y social, el juego es la principal causa de un trastorno mental denominado trastorno de juego o juego patológico, antiguamente denominado ludopatía, cuyas consecuencias pueden llegar a ser muy graves en lo personal, social o familiar. Se trata de un trastorno de naturaleza adictiva, puesto que el jugar activa los mismos circuitos de recompensa que las drogas y la sintomatología clínica del trastorno de juego es similar a la de las drogodependencias.
En 1977 se legalizaron bingos, casinos y máquinas. La publicidad de estos juegos ha estado muy restringida desde entonces, quedando, de facto, prácticamente prohibida. A finales del siglo XX el juego se consideró un problema de salud pública por parte de la comunidad científica internacional.
En el siglo XXI, la aplicación de los avances electrónicos y de Internet a los juegos de apuesta supuso un cambio cualitativo y una expansión cuantitativa de esta actividad, principalmente entre la población juvenil.