En la noche del 27 al 28 de diciembre, el Centro Ecuestre La Granja en el barrio de la Overuela ha sido el lugar elegido por los ladrones para hacerse con doce caballos que, de momento, no ha aparecido a pesar de la búsqueda que está realizando la Guardia Civil y Policía Nacional. Un robo que tiene en vilo al propietario del centro, a los de los animales, así como a Ana González-Juliana Leal profesora del centro quien explicó que no es esta la primera vez en que sucede algo parecido.
El 6 de septiembre de este mismo año “sufrimos un robo similar” que en aquella ocasión se resolvió con el esclarecimiento de los hechos al hallarse los equinos “escondidos en la finca” de quien presuntamente había realizado el robo.
Y aunque las sospechas han dirigido inmediatamente hacia la misma persona la responsable del centro explicó que “en esta ocasión no estaban allí”. Pese a ello, la profesora cree que puede haber sido la misma persona porque “un ladrón no puede entrar con la llave, sin romper nada y elegir a los mismos doce caballos que se llevó la otra vez”.
Peligro de cierre si los animales no aparecen
Pese a esas sospechas, Policía Nacional y Guardia Civil trabajan en otras hipótesis e incluso la DGT colabora, sobrevolando con helicópteros la zona, en la búsqueda de los caballos. Y no solo de los animales, sino también del material robado esa misma noche.
“Se llevaron las monturas, cabezadas, protectores, mantas, conchas y estribos”, en definitiva, todo lo que se necesita para montar a los caballos. Un material que más o menos puede rondar los 6.000 euros. El centro se enfrenta además a un problema mayor y es que, en el caso de que la situación no se resuelva favorablemente, “tendremos que cerrar”. Por eso, González confía en que las investigaciones conduzcan a buen puerto y todo termine como una pesadilla con final feliz.