Michelin y la Universidad de Valladolid (UVA) desarrollan, desde 2001, un programa de colaboración con un objetivo común: poner en valor la importancia de la formación práctica de los jóvenes estudiantes, para que puedan reforzar los conocimientos adquiridos durante sus estudios antes de acceder al mundo laboral. Para ello, entre otras colaboraciones, ambas entidades realizan conjuntamente cursos y seminarios de formación, que son impartidos cada año tanto en las aulas de la Universidad como en la propia Fábrica de Michelin en Valladolid.
En esta edición, un total de 33 estudiantes de los últimos cursos de la Escuela de Ingenierías Industriales de la UVA han participado en los 'Cursos SOFT SKILLS para alumnos egresados'. Una oportunidad con la que han podido experimentar cómo aplicar al mundo industrial los conocimientos adquiridos durante la carrera, mediante una serie de cursos y sesiones de formación incluidos en el programa que Michelin también imparte a sus directivos. Además, han podido conocer de primera mano el proceso de fabricación de un neumático.
Los alumnos participantes se formaron en alguna de las siguientes áreas: presentaciones eficaces, trabajo en grupo y animación de reuniones o comunicación interpersonal. Temáticas impartidas con la colaboración de Michelin, conocedor de la importancia de la formación como base del desarrollo de la sociedad. Es por eso por lo que la compañía colabora regularmente con entidades como la UVA, donde también participa en los Premios Michelin a los Mejores Proyectos Fin de Carrera de la Universidad de Valladolid sobre Innovación, Calidad Total y Organización; o en el Proyecto Mujer e Ingeniería.
La clausura del programa de formación 2021/2022 tuvo lugar el 25 de febrero en la factoría de Michelin en Valladolid, en un acto presidido por el rector de la Universidad de Valladolid, Antonio Largo Cabrerizo, y el director de la Fábrica Michelin de Valladolid, J. Bruno Arias Pérez, entre otras personalidades. Durante el acto, el rector Antonio Largo Cabrerizo destacó "Entrar en contacto con el mundo de la empresa es muy bueno para la formación de los alumnos y les aporta una experiencia y un valor añadido enriquecedores por las competencias transversales que adquieren".
Por su parte, Bruno Arias resaltó que "Esta dinámica ganadora hay que mantenerla y fomentarla todavía más, ya que la colaboración universidad-empresa hace que todos ganemos”. Los alumnos destacaron que “las formaciones recibidas son un complemento importante para los estudios de ingeniería, y es importante contar con personas y empresas como Michelin, que las dominen y las transmitan con este saber hacer y capacidad de comunicación".