La Cofradía de Nuestra Madre Santísima de la Soledad y Virgen de la Alegría de Medina del Campo comienza su semana de cultos en torno a su imagen titular, Nuestra Madre Santísima de la Soledad, y a la imagen de devoción de Jesús de la Expiración. En este sentido, la Iglesia Colegiata de San Antolín, albergará el Solemne Triduo a la Virgen de la Soledad que se desarrollará los días 24,25 y 26 de marzo de 2022.

El primer día de triduo, tendrá lugar la imposición de medallas a los nuevos cofrades. El segundo día de triduo, además de la bendición de la corona de espinas tendrá un acto de veneración extraordinario a Nuestra Madre de la Soledad con motivo de la consagración que el Papa Francisco realizará al corazón de María a las naciones de Rusia y Ucrania. Por su parte, el sábado 26 de marzo tendrá lugar la meditación de los siete dolores de Nuestra Madre, la eucaristía de difuntos, y el fervoroso acto de veneración a la titular de la cofradía que, como en ocasiones anteriores, tendrá a sus pies la cesta de esperanza de ayudas a familias necesitadas. Todos los actos comenzarán a las 7 y media de la tarde con el rezo del santo rosario y el triduo.

Los cultos cuaresmales de esta cofradía finalizarán el domingo 27 de marzo, cuando la cofradía realice la Eucaristía a Jesús de la Expiración. Este culto se desarrollará en la Iglesia Colegiata. Comenzará a las 11:30 horas con el rezo del Rosario y la oración a Jesús de la Expiración, para finalizar con la eucaristía correspondiente al IV Domingo de Cuaresma y la veneración de la cruz.

De esta manera, la cofradía prepara la antesala de sus actos procesionales que tendrán su culminación en la Semana Santa 2022.

Recuperación del manto histórico

Como gran novedad para el triduo 2022, la imagen de Nuestra Madre Santísima de la Soledad recupera su manto histórico, datado del siglo XIX. Se trata de un austero manto de terciopelo negro que ha procesionado hasta principios de los años 80 del siglo XX. Además, estrenará una nueva corona de espinas naturales, donada por una familia devota de la imagen, procedente de Letonia. Junto a la corona de espinas, Nuestra Madre Santísima de la Soledad portará entre sus manos un nuevo pañuelo.