El 2022 está siendo el año de Adrián Alonso. El joven patinador de Aldeamayor de San Martín hizo historia el pasado fin de semana al darse un baño en bronce en el Campeonato de España de Velocidad; una modalidad en la que Castilla y León sólo presumía de una medalla en su palmarés… hasta ahora.
El patinódromo Moreda de Gijón ha resultado ser un huerto en el que Adrián Alonso siempre cosecha los mejores frutos. En ese mismo escenario, hace unas pocas semanas, el patinador de los Rolling Lemons subía al podio en la primera jornada de la Copa de Europa y en el Trofeo Internacional. Una foto que se repetía por partida triple el pasado fin de semana, en el que se colgaba tres medallas de bronce, codeándose con los mejores patinadores del país.
La irrupción de Adrián Alonso ha permitido que el nombre de Sergio Álvarez -ganador del primer bronce autonómico en un Nacional- no esté sólo en el palmarés de Velocidad de Castilla y León. Alonso, hizo historia a toda velocidad, demostrando una vez más ser un todoterreno en la pista.
Los 1.000 metros Sprint, los 10.000 metros Eliminación y los 5.000 Puntos fueron las distancias en las que Alonso voló para aglutinar un valorado botín de tres preseas de bronce que pudo ser superior. Primero, por lo cerca que se quedó de alcanzar las medallas de metales más valiosos y, segundo, porque en la prueba de 500 metros se vio relegado a una cuarta posición después de que los jueces sancionaran una falta técnica en un adelantamiento, lo que supuso perder un puesto.
Con sus tres medallas, Adrián Alonso deja la huella de sus ruedas en la historia del patinaje autonómico y marca el camino para los velocistas de los Rolling Lemons; club que acudió al Campeonato de España con 13 participantes clasificados para la cita nacional.