La Policía Nacional ha detenido, a finales del pasado diciembre, en el marco de la operación “Kedilla”, a un varón de 56 años de edad y con tres antecedentes de diversa naturaleza, como presunto autor de un delito de acoso sexual a un menor de 15 años utilizando las redes sociales.
Investigación
Los agentes iniciaron la investigación a raíz de una denuncia interpuesta en el mes de noviembre de 2021 por la madre de un menor de edad tras enterarse de que un individuo mantuvo conversaciones de contenido sexual con su hijo a través de aplicaciones de mensajería instantánea. Para ello las pesquisas se centraron en comprobar los hechos denunciados concluyendo la presunta existencia de un delito de “child grooming” (acoso sexual a un menor de edad utilizando las redes sociales).
Tras diversas gestiones, los investigadores lograron identificar a un varón que trabajaba en un establecimiento de comida rápida y se aprovechaba de esta circunstancia para ganarse la confianza de los jóvenes a los que invitaba ocasionalmente a algún refresco para entablar amistad con ellos y conseguir sus números de teléfono.
En este caso se ganó la confianza del menor de edad e intentó insistentemente quedar con él para mantener relaciones sexuales, utilizando frases muy descriptivas sobre las prácticas sexuales que deseaba llevar a cabo.
Identificación de otra víctima menor de edad
Los funcionarios intervinientes localizaron y detuvieron al presunto autor de los hechos denunciados solicitando mandamiento judicial para realizar el análisis del teléfono móvil intervenido al detenido. Del exhaustivo examen practicado al terminal intervenido, se pudo identificar a un menor de 15 años de edad, residente en Valladolid y con el que el encartado contactó a través de una red social utilizada para conocer a personas homosexuales. En esta ocasión tras conseguir el número de teléfono del niño se hizo pasar por un joven atractivo enviándole varias fotografías desnudo y vídeos de contenido sexual para solicitar que le enviase fotografías y vídeos autoproducidos de contenido sexual. Igualmente se comprobó que los padres del menor identificado no
habían interpuesto denuncia con anterioridad y tuvieron conocimiento de los hechos a raíz de la investigación policial.
El arrestado figura inscrito en el Registro Central de Delincuentes Sexuales y de Trata de Seres Humanos del Ministerio de Justicia debido a que fue condenado en sentencia firme en el año 2012 por un delito de exhibición obscena ante menores de edad o personas con discapacidad necesitadas de especial protección.
Por estos hechos pasó a disposición judicial, junto a las diligencias instruidas, y la autoridad judicial decretó su libertad con cargos.
La investigación y detención han sido llevadas a cabo por agentes del Grupo de Investigación Tecnológica de la Comisaría Provincial de Valladolid.
La protección de los colectivos más vulnerables es una prioridad en la Policía Nacional. Por ello se quiere resaltar la conveniencia de que los padres o tutores legales supervisen los dispositivos con acceso a internet que utilicen los
menores de edad para evitar que sean víctimas de acoso a través de la red como ha ocurrido en el presente caso. La prevención es esencial y para ello es importante estar informado y conocer los riesgos que puede generar el uso incorrecto de las redes sociales e Internet. Si un menor sufre alguna situación de este tipo debe informar a sus padres y denunciar los hechos ante la Policía y cualquier persona que reciba material de este tipo no debe compartirlo y siempre informar de ello a los agentes.