La Guardia Civil ha detenido a cuatro personas por delitos relacionados con municiones y tenencia ilícita de armas. En esta operación han sido intervenidos 6.760 cartuchos metálicos, 21 armas de fuego, 8,6 kilos de pólvora, 26 granadas de mortero y silenciadores, entre otros. Todo ello se ha incautado en seis registros que se han realizado en distintas zonas de España: Valladolid, La Rioja y Valencia.
La operación comenzó en octubre cuando detuvieron en Madrid a uno de los principales traficantes de munición del país. Él se había encargado de vender más de 36.000 cartuchos metálicos por internet en todo el territorio nacional.
Uno de los compradores que recurría a este mercado clandestino era una persona que reside en la provincia de Pontevedra. La investigación permitió descubrir que también tenía otras fuentes de suministro; dos de ellas residentes en la provincia de valladolid que también se dedicaban a la venta ilegal.
Estos dos vendieron a lo largo de los últimos años grandes cantidades por un valor de más de 25.000 euros. Los agentes lograron dar con los compradores de estas personas en Valladolid desde La Rioja y Valencia. Una vez que dieron con todos los implicados, se practicaron seis entradas y registros en varios domicilios e inmuebles.
Los agentes también han intervenido barras de cañón en bruto y cañones semi elaborados en proceso de fabricación y otros componentes de armas de fuego; dos silenciadores, 29 cargadores de alta capacidad, 2.600 pistones fulminantes y numerosos proyectiles y vainas. Además de tres máquinas de recarga y accesorios, un torno fresadora y herramientas para la rehabilitación de armas inutilizadas.