La jueza del Juzgado de Instrucción Número 5 de Valladolid, Soledad Ortega, ha dictado una providencia, fechada a 26 enero de este año 2023, con la que busca resolver quién ayudó al principal sospechoso del caso, Óscar S. a realizar el doble borrada en la centralita de su Volkswagen T-ROC.
La Guardia Civil ha solicitado al Juzgado la autorización para contar con la colaboración de las operadoras de telefonía con el fin de tratar de averiguar la identidad de la persona o las personas que, supuestamente, ayudaron al principal sospechoso a realizar un borrado de datos en la centralita con el fin de eliminar pruebas.
En la solicitud de la jueza, a la que ha tenido acceso EL ESPAÑOL a través de fuentes jurídicas, se habla del informe del perito judicial de la empresa SEADA. Se hablaba de la existencia de dos borrados intencionados de los registros de eventos y averías recogidos en los sistemas electrónicos de vehículo. Habían sido realizados por un técnico con altos conocimientos en materia de electrónica del automóvil, apuntaba dicho informe.
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Dos borrados que tuvieron lugar, el 1 de febrero de 2022, a las 13.57:07 horas y el 2 de abril de 2022, a las 11.05:06 horas. Además, se añade que obtenida la información y tras su análisis policial por los técnicos del Grupo de Apoyo Tecnológico Operativo (GATO), de la Unidad Operativa de la Guardia Civil, se determinó que entre las 13.51:45 y las 14.07:14 horas, del 1 de febrero de 2022, el IMSI del Volkswagen T-ROC de Óscar podría estar en la N-122, a su paso por el núcleo urbano de la localidad vallisoletana de La Cistérniga.
En lo que respecta al segundo borrado, el del 2 de abril de 2022, a las 11.05:06 horas, tal y como informó el oficio policial del 26 de octubre de 2022, el T-ROC del principal sospechoso, se encontraba estacionado en la calle González Silva, número 9 de la localidad de La Cistérniga.
Una vez ubicado el vehículo en el momento de su manipulación, por el Grupo de Apoyo Tecnológico Operativo GATO, que practicó un estudio de coberturas de telefonía logrando cada una de las celdas CGI (Cell Global Identity) que daban cobertura a cada uno de esos puntos en los que se realizaron los vehículos, apuntan que parece apropiado acceder a lo que los agentes y la jueza solicitan.
Todo para detectar cuántos números de abonados telefónicos se encontraban conectados a las diferentes celdas de telefonía que ofrecían cobertura a los puntos en los que se encontraba el vehículo del investigado en el momento de cada uno de los borrados, así como la identificación de sus titulares y usuarios, ante las circunstancias probables de que el responsable del borrado portara su móvil, estando sujeto a la cobertura ofrecida por los repetidores de telefonía.
Con la información, los agentes podrían identificar las líneas telefónicas localizadas en las proximidades del vehículo del investigado en el momento de cada uno de los borrados, permitiendo establecer coincidencias entre ellas, e individualizar el número de abonado y su usuarios.
La jueza pide a las compañías telefónicas aportar esta información de forma inmediata al Grupo de Homicidios y Personas Desaparecidas de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial de Valladolid y de la de la Sección de Homicidios, Secuestros y Extorsiones de la UCO, con los datos solicitados.
Todo para dar con los presuntos ayudantes de Óscar S. para realizar estos borrados en la centralita de su vehículo.