Unas retiradas de dinero de la cuenta bancaria de manera “irregular” hicieron saltar la sospecha a los hijos de la víctima. En total sumaban 115.270 euros usando cheques al portados y retiradas en caja. Por este motivo, decidieron poner una denuncia que ha finalizado con la detención por parte de la Policía Nacional de Valladolid de una mujer como presunta autora de un delito de robo con fuerza.

La denuncia dice que entre los días 2 y 15 de febrero de este año los hijos  realizaron dos reintegros en caja por 6.000 euros. Y cual fue la sorpresa cuando el día 17 al comprobar la cuenta corriente de la de madre sólo tenía 600 euros, no pudiendo averiguar qué había pasado con los 5.400 que faltaban.

Así, el 3 de marzo la cuidadora accedía al banco y cobraba un cheque de 2.000 euros, pudiendo comprobar los hijos a través de unas cámaras de vigilancia que habían instalado, que la trabajadora abría el cajón de la cómoda donde su madre guardaba el dinero bajo llave dentro de una billetera y cogía la misma. Ese mismo día, uno de los hijos comprobó junto a su madre que en la billetera había sólo 500 euros de los 2.000 que se habían guardado esa misma mañana.

Las gestiones realizadas por los agentes determinaron que la trabajadora había hecho una serie de pagos en efectivo 7.490 euros y había recibido unos ingresos por valor de 13.861 en su cuenta que no correspondían con los ingresos obtenidos por la nómina y que no estaban justificados. Además desde la llegada de esta empleada el gasto mensual de la víctima había aumentado más del doble con respecto a los años anteriores. 

La detenida fue puesta en libertad con cargos tras pasar a disposición de la Autoridad Judicial.