Las organizaciones feministas de Castilla y León, encabezadas por el Foro Feminista como encargado de la organización y logística, han celebrado hoy una manifestación en Valladolid para defender “el derecho efectivo a abortar” en la Sanidad pública de todas las provincias de la Comunidad, y mostrar su preocupación ante las “amenazas de limitar” sus libertades sexuales y reproductivas.
Según ha informado el Foro Feminista de Castilla y León, a la manifestación se han sumado "organizaciones de todo el Estado” para reclamar que, en todas las comunidades autónomas, se acceda a la interrupción voluntaria del embarazo “de manera efectiva en la red sanitaria pública”.
En Castilla y León la reclamación viene dada porque, por el momento, los abortos “solo se realizan en Valladolid y Burgos”, por lo que las mujeres que quieren interrumpir su embarazo en la Sanidad pública “sufren dilaciones y obstáculos injustificables bajo cualquier punto de vista”, además de tener que desplazarse “hasta 600 kilómetros en un día”, cuando finalmente se les da cita para abortar.
La manifestación ha comenzado a las 12.30 horas en la plaza de Fuente Dorada de Valladolid para después enfilar las calles Ferrari, plaza Mayor, Santiago, plaza Zorrilla, Miguel Íscar, Duque de la Victoria, Ferrari y, de nuevo, la plaza Mayor, donde se ha leído un manifiesto para reclamar que la Sanidad pública “sea la depositaria de las interrupciones voluntarias del embarazo practicadas” como corresponde “a un plan integral de atención a las mujeres, en el cumplimiento de los derechos de estas en lo referente a su salud sexual y reproductiva”.
También han pedido “que dejen de cuestionarse los derechos adquiridos de la práctica de las interrupciones voluntarias del embarazo con amenazas veladas o directas de los poderes públicos”, en referencia al protocolo anti-abortos anunciado a principios del mes de enero por el vicepresidente de la Junta, y que desde el Foro Feminista se consideran “ataques directos de la ultraderecha más rancia que avanza a nivel global y tiene como objetivo poner a las mujeres de nuevo bajo el control social del patriarcado y cercenar la práctica de nuestra libertad sexual y reproductora”.