“Castilla y León es una Comunidad Autónoma con una gran riqueza en cuanto a historia, cultura y gastronomía. La provincia de Valladolid cuenta con el mayor número de habitantes y con una situación céntrica claves. Destaca, del pasado, su capitalidad de la corte. Hoy en día es una ciudad en auge en lo que al turismo se refiere”, confiesa en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León Beatriz Herreras Torres.

Ella es, a sus 46 primaveras, guía oficial de Turismo desde hace 12 años. Con ella nos vamos a ir a realizar cinco escapadas que son mágicas e imprescindibles dentro de la provincia de Valladolid. Ahora que llega el verano, el buen tiempo, las vacaciones y demás, no hay mejor plan que marchar hasta estos cinco municipios y disfrutar de todo el encanto de la provincia vallisoletana.

“Valladolid está de moda”

“La provincia de Valladolid combina un pasado glorioso, siendo capital del reino y de España, con una gran riqueza cultural. Destaco las fiestas y las semanas santas que cuentan con declaraciones, incluso de bienes de Interés Turístico Internacional. Una gran gastronomía y, para los amantes del buen vino, una infinidad de denominaciones de origen y caldos que están entre los mejores del mundo”, asegura nuestra acompañante.

Beatriz Herreras Torres no duda en asegurar que la provincia pucelana “está de moda” contar también con un rico patrimonio y con una historia amplia y nutrida que queda reflejada también con el esplendor de sus castillos. Fortalezas que esconden, dentro de ellos mismos, mucho que contar.

Beatriz, guía oficial de Valladolid

“Los turistas apuestan por conocer la historia de la provincia y de la ciudad. La gran mayoría vienen atraídos por alguna oferta cultural o evento y con el fin de degustar, también, alguna de esas tapas sabrosas junto a los mejores vinos. La mayoría quedan sorprendidos porque no conocían todo lo que esta tierra esconde”, explica la guía.

Cinco propuestas

Nuestra primera parada es en Valbuena de Duero. A 42 minutos en coche de la capital del Pisuerga. “Es un pueblecito con mucho encanto que se encuentra en plena Ribera del Duero y en el que se pueden degustar alguno de los mejores vinos de la provincia”, explica nuestra entrevistada.

Cuenta con la Iglesia de Santa María La Mayor del Castillo, del siglo XVIII. En San Bernardo, su pedanía, se encuentra el Monasterio Cisterciense de Valbuena de Duero. “Hoy en día se ha convertido en hotel balneario”, añade Beatriz, que apunta además que “en su interior se encuentra la sede de las Edades del Hombre.

Iglesia de Santa María La Mayor de Valbuena de Duero Diputación de Valladolid

La segunda parada la hacemos en Tordesillas. A 33 minutos de la capital del Pisuerga, viajando en vehículo. Es una Villa de Reyes y de Reinas. Lugar en el que se firma el Tratado de Tordesillas ente los Reyes Católicos y el Reino de Portugal. El lugar en el que vive, durante 46 años, y muere la reina Juana de Castilla.

“Cuenta con el único edificio de patrimonio nacional con el que cuenta la provincia de Valladolid: el Monasterio de Santa Clara. Allí podemos visitar las Casas del Tratado, el Museo de Arte Sacro, la Plaza Mayor y sus iglesias. Un lugar para disfrutar de la historia y de la cultura”, añade Beatriz Herreras Torres.

Día del Tratado en Tordesillas Diputación de Valladolid

En el ecuador de nuestro viaje llegamos hasta Medina de Rioseco. A 37 minutos de Valladolid. Es la Ciudad de los Almirantes de Castilla y guarda un gran legado en forma de tres grandes iglesias que más que eso parecen catedrales.

“Es curiosa allí la Leyenda del Cocodrilo del Sequillo y muy interesante visitar la Dársena del Canal de Castilla. Recomendaría realizar el viaje en barco y conocer alguna de sus esclusas. La visita a Medina de Rioseco se puede completa con la ruta guiada a la Antigua Fábrica de Harinas de San Antonio”, añade nuestra guía.

Rúa Mayor en Medina de Rioseco

La cuarta parada la hacemos en Peñafiel. A 48 minutos en coche de la ciudad del Pisuerga. “Posee varios atractivos porque combina historia y vinos con denominación de origen”, asegura Beatriz. Y es que la localidad vallisoletana se encuentra enclavada en plena cuna de la Ribera del Duero. En el castillo del municipio se encuentra el Museo del Vino.

Resulta imprescindible visitar la Plaza del Coso, desde la que se puede admirar una perfecta instantánea de la fortaleza peñafielense y es un gran plan visitar alguna de las bodegas del lugar para deleitarse con los mejores vinos.

Castillo de Peñafiel Diputación de Valladolid

La última de las paradas la hacemos en Medina del Campo. A 46 minutos de Valladolid. “Puede presumir de haber sido el lugar en el que vivió, murió y testó la Reina Isabel La Católica”, apunta nuestra entrevistada, que invita a visitar el Palacio Testamentario, la Colegiata de San Antolín y la Plaza Mayor de la Hispanidad, que es la más grande de España, con 14.000 metros cuadrados.

“En la plaza se celebraron las ferias más grandes del mundo en el S.XVI. No nos podemos olvidar del Castillo de la Mota y de su historia. Es también visita obligada”, finaliza Beatriz.

La Colegiata de Medina del Campo Diputación de Valladolid

La importancia del turismo tras el coronavirus

La previsión del turismo es seguir creciendo, poco a poco. Tras la pandemia ha aumentado el interés por viajar, tal vez en compensación a esos viajes que no se pudieron realizar durante los casi dos años que duró la pesadilla del coronavirus”, señala nuestra guía de confianza.

Lo cierto es que en Castilla y León en general, y en Valladolid en particular, las propuestas son muchas para disfrutar de todo el encanto natural, cultural y patrimonial y pasar un buen rato, todo ello bañado con la mejor gastronomía y los mejores vinos, que, de eso, nuestra provincia sabe, y mucho.

 

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