El mesón vallisoletano que hace una excelente carrillera con setas suma un Solete Repsol: “Pensábamos que era una broma”
El establecimiento hostelero suma un nuevo reconocimiento a 36 años de trabajo bien hecho en el bello municipio vallisoletano de Urueña
9 julio, 2023 07:00Noticias relacionadas
Urueña se encuentra ubicada en uno de los bordes noroccidentales de los Montes Torozos. Esto convierte a la localidad vallisoletana en un mirador natural que atesora unas vistas excepcionales. Incluso, los días claros, se puede divisar tanto la Sierra de la Culebra como los Montes de Teleno. Un lugar único para disfrutar de esos espectaculares paisajes y, también, de la cultura porque es conocida como la Villa del Libro.
La localidad pucelana se encuentra ubicada a unos 40 minutos si viajamos en coche desde la ciudad del Pisuerga y cuenta, en la actualidad y según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) con un total de 203 habitantes. Además de todo su encanto patrimonial, también destaca por su gastronomía y por los restaurantes que allí dan los mejores platos a los comensales que hasta el lugar se acercan.
Uno de esos establecimientos hosteleros es el Mesón Villa de Urueña que se ubica en la Plaza del Corro de San Andrés número 6 de la localidad. El restaurante consiguió, la pasada semana, un Solete de la Guía Repsol que recibieron con los brazos abiertos, aunque sin acabar de creérselo, como cuentan, en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León, Luis Antonio Vallecillo Negro y Olga Fernández Puerta, los dos propietarios del conocido establecimiento.
30 años de historia
“Hace 36 años comienzo en el mundo de la hostelería. Regresaba de Ermua junto a mi hermano y cogí el bar del pueblo en 1987. A los cinco años de abrir, por la demanda existente en la localidad con el crecimiento del turismo y con la llegada, en aquellos primeros años, de Joaquín Díaz, reconvertimos el bar en Mesón-Restaurante”, confiesa Luis Antonio Vallecillo Negro a este periódico.
Y así nació, en Urueña, el Mesón Villa de Urueña, hace 30 años, después de ser un bar y pasando, en la actualidad, a convertirse en uno de los referentes de la provincia de Valladolid para disfrutar de un buen festín gastronómico.
“Me considero un hombre extrovertido, espartano y trabajador. A base de esfuerzo primero con mi familia y ahora, los últimos 19 años, con mi esposa Olga que es la cocinera, este mesón que no deja de darnos alegrías a base de éxitos ha salido adelante”, asegura nuestro protagonismo que da también el valor que merece a su mujer, la cocinera.
Un Solete Repsol para seguir brillando
La pasada semana consiguieron su primer ‘Solete Repsol’. Se enteraron por la prensa y aseguran que “pensábamos que era una broma”. Vamos, que no se lo creían en ese primer momento en el que te pilla de sopetón. Un lugar que cuenta con seis trabajadores en la cocina, en la barra y en el comedor.
Sobre si este galardón supone un premio al trabajo bien hecho aseguran que “sí” y que su fin último pasa por “satisfacer cada día a nuestros clientes”. El éxito no les va a cambiar y “continuarán trabajando de la misma manera”, como hasta ahora, vaya.
“A día de hoy, afortunadamente, en Urueña el turismo está en auge y podemos mantenernos. Todo, tras salir de la pandemia que fueron meses muy duros. Queremos seguir manteniéndonos, como estamos ahora”, añade Olga Fernández Puerta, convencida.
Las delicias del lugar
Los dos dueños de este conocido establecimiento hostelero de la provincia pucelana no dudan en apuntar que el plato estrella del lugar es la carrillera de ternera con setas. “Es nuestra especialidad”, apunta Luis Antonio. Mientras que Olga añade que la especialidad en lo que a los postres se refiere es el libro, un hojaldre con crema de avellana y mazapán que quita el sentido.
Además, destacan en el lugar los guisos y platos de cuchara con la cocina tradicional como protagonista. También, y por encargo, se puede comer también un sabroso lechazo asado al horno. Los mejores platos con la mejor atención y trato. Los comensales lo agradecen y marchan doblemente agradecidos, como no podía ser de otra forma.
El Mesón Villa de Urueña brilla más aún con la consecución de ese nuevo ‘Solete Repsol’ y mira al futuro con optimismo y con la misión de seguir con el excelente trabajo que vienen haciendo en los últimos más de 30 años.