La Guardia Civil de Valladolid ha desarticulado un grupo criminal dedicado al robo de catalizadores de vehículos por todo el país, en el marco de la Operación Catalipa. 

Las investigaciones se iniciaron a raíz del robo de 50 catalizadores valorados en más de 60.000 euros en un camión estacionado en la localidad vallisoletana de Simancas y estas permitieron descubrir la existencia de un grupo de personas procedentes de países del este de Europa que se dedicaban a robar catalizadores de vehículos de modo itinerantes y sin fijar una residencia habitual. 

Según ha dado a conocer la Guardia Civil, el modus operandi de esta banda criminal se basaba en robar los catalizadores accediendo a los bajos del vehículo estacionado y cortando la pieza con una radial, o, en su lugar, acceder a vehículos transportadores de estas piezas logrando la sustracción de una gran cantidad de unidades en un solo hecho, como ocurrió en Simancas o en la localidad de Tordesillas. 

Además, las indagaciones de los agentes permitieron la comprobación de otros dos robos en la provincia de Cádiz y otro en la provincia de Málaga por parte de las mismas personas, así como culminar la operación con la detención del "cabecilla" en Murcia. 

Al parecer, quien receptaba el material robado era el gerente de una chatarrería que también ha sido investigado por la Guardia Civil de Valladolid.