El Fiscal ha ordenado la apertura de juicio oral contra Erika C.M.R. y contra Samuel J.M.R., en un pleito que arrancará este martes, 12 de septiembre, a las 10.00 horas, al Juzgado de lo Penal después de una pelea entre ambos en la que se desarrollaron los arañazos, puñetazos y demás y que acaba en el banquillo de los acusados.
Los hechos, como reza el escrito de acusación al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL de Castilla y León, se produjeron el pasado 30 de julio de 2022, sobre las 16.30 horas. Todo por motivos no determinados. Arrancó una fuerte discusión entre la acusada Erika C.M.R y Samuel J.M.R., también acusado y hermano de la primera. Convivían ambos en un domicilio situado en Laguna de Duero.
En el momento de los hechos, ambos hermanos se encontraban en la habitación de ella, y empezaron a pelearse propinándose golpes, empujones y puñetazos durante el transcurso de dicha pelea.
Tras la agresión mutua, Samuel sufrió lesiones que consistían en erosiones tipo arañazo en el tórax, contusiones en ambos hombros y cuello, que precisaron de asistencia facultativa, sin tratamiento médico ni quirúrgico posterior. Fueron cinco los días de perjuicio personal básico, eso sí, sin impeditivos ni secuelas.
Por su parte, Erika, la otra acusada, sufrió lesiones consistentes en contusiones tanto en la cara como en el cuello, la muñeca y la pierna izquierda. Precisaron, para ser curados, su sanidad una primera asistencia facultativa, sin tratamiento médico ni quirúrgico, curanto tras 7 días de perjuicio personal básico y sin secuelas.
En un momento determinado de la pelea, intervino el padre de ambos, que estando en el baño del domicilio, escuchó las voces y acudió hasta la habitación de Erika, para separarlos. La mujer, se golpeó con el borde de una puerta, sufriendo la fractura coronaria del incisivo lateral inferior izquierdo, necesitada de restauración odontológica, y quién causó de lesiones a su padre.
El padre, a consecuencia del forcejeo, presentaba lesiones con erosiones en el brazo izquierdo y hematomas en el hombro derecho, para cuya sanidad precisó de una primera asistencia sin tratamiento médico.
Tras zafarse de su padre, Erika fue a la cocina y cogió un rodillo de madera y cuando su padre se lo arrebató, cogió un cuchillo de cocina de 11 centímetros de empuñadura y 20 de hoja, gritando que se iban a enterar. Su padre se lo quitó hasta la llegada de la Guardia Civil.
La acusada, Erika C.M.R. es mayor de edad y sin antecedentes penales, igual que el otro acusado, Samuel J.M.R..
El Ministerio Fiscal asegura que procede juzgar a Samuel por un presunto delito de lesiones en el ámbito de la violencia doméstica y piden para él una pena 8 meses de prisión y privación del derecho a la tenencia y porte de armas durante dos años. También la prohibición de aproximarse a su hermana Erika, a su domicilio o lugar de trabajo a menos de 500 metros durante un año y ocho meses.
Mientras que a Erika se le imputan un delito de lesiones en el ámbito de la violencia doméstica y se pide para ella 8 meses de prisión y privación del derecho y tenencia y porte de armas de 2 años. La misma pena pena por un delito de lesiones en el ámbito de la violencia doméstica sobre su padre y también por un delito de amenazas leves con armas en el ámbito de la violencia doméstica del mismo tiempo.