1,2 millones de euros. Esta es la cantidad de dinero que la Consejería de Movilidad y Transformación Digital de la Junta de Castilla y León ha destinado a la rehabilitación y conservación del emblemático puente situado en la localidad vallisoletana de Simancas, también conocido como puente romano. 

Según han dado a conocer este lunes desde la Junta, el plazo de ejecución de las obras es de 18 meses y, teniendo en cuenta que estas comenzaron el pasado 1 de julio, está previsto que el puente esté listo para diciembre de 2024. 

Dichas obras, las cuales han sido visitadas esta misma mañana por la consejera de Movilidad y Transformación Digital, María González Corral, se han realizado debido a los deterioros con los que cuenta este bien patrimonial como consecuencia del paso del tiempo y que podrían suponer importantes riesgos para su estructura a corto y medio plazo si no reparan. 

Así, en su intento de solucionar la situación y mantener el puente, la Consejería ha iniciado los trabajos de rehabilitación con una serie de actuaciones de carácter preventivo que buscan impedir las filtraciones de agua y las erosiones en las bases de los tajamares. Ahora mismo estos se centran en la protección y reparación de las zonas dañadas en las bases de tajamares y espolones, la colocación de sistema de andamiaje, y el saneo y limpieza de la superficie del puente.
 
Además, el proyecto de obra contempla actuaciones paliativas, de reparación superficial de la fábrica dañada, que consisten en un conjunto de actividades para sanear los paramentos, regenerar la superficie de los sillares y protegerlos frente a los distintos agentes. Entre ellas se encuentran la de rejuntar la sillería, reconstruir la sillería mediante mortero de cal natural, inyectar mortero de cal para sellar las grietas existentes, sanear y rellenar zonas erosionadas en la base de los tajamares, etc. 
Asimismo se pretenden llevar a cabo actuaciones en plataforma, pavimentación y drenaje consistentes en la retirada de farolas y señales verticales, demolición del pavimento existente, revestimiento impermeable, pavimentación con adoquines de granito, y reposición y mejora de los servicios existentes sobre la plataforma del puente, tales como la conducción de telecomunicaciones y alumbrado. 
El puente de Simancas se ubica en el antiguo trazado de la calzada romana, entre Augusta Emérita y Caesaraugusta, y se trata de un puente medieval de piedra, construido en sillería con 17 arcos, la mayoría ojivales, con tajamares y contrapilares.
Ocupa un lugar de gran importancia para las comunicaciones terrestres desde la antigüedad y actualmente está destinado únicamente al tránsito peatonal. Tanto, que incluso forma parte del trazado del Camino de Santiago de Madrid. 

La consejera de Movilidad y Transformación Digital, María González Corral, durante su visita a las obras de rehabilitación del puente de Simancas JCyL