El Frente Obrero aterrizará en Valladolid este domingo para protestar contra el centro de refugiados del barrio de Las Delicias y alertar sobre la "islamización". La portavoz del partido Sara Rivas protagonizará un acto en el Centro Cívico Delicias este domingo 17 de diciembre a las 12:00 horas del mediodía que lleva como título 'El modelo migratorio y la islamización', una de las cuestiones en las que más ha incidido la formación en los últimos meses.
El partido, dirigido por el mediático Roberto Vaquero, ya se hizo notar en la ciudad hace unas semanas con la colocación de diferentes pancartas a lo largo y ancho de la ciudad contra el centro de refugiados de Delicias, cuya ubicación se prevé junto al Hospital Río Hortega de la ciudad. En las mismas, se podía leer: 'Evitemos que España se convierta en Francia. Stop islamización' o 'El centro de refugiados a la casa del alcalde'.
El Frente Obrero se presentó por primera vez a las últimas generales el pasado 23 de julio obteniendo un total de 46.530 votos en toda España en su primera cita electoral y ha centrado gran parte de su argumentario durante los últimos meses en alertar sobre la "islamización" de España y los supuestos peligros de la inmigración masiva. La formación tiene como principal objetivo dar la sorpresa en las elecciones europeas del próximo mes de junio, a las que Vaquero ha anunciado que se presentará como cabeza de lista.
El partido se hizo conocido por sus escraches a dirigentes políticos de "izquierda postmoderna" como Pedro Sánchez, Irene Montero o Yolanda Díaz. El pasado 11 de abril, en un acto en Segovia, miembros del partido boicotearon un mitin del presidente del Gobierno recriminándole su cambio de posición con respecto al Sahara, aceptando la propuesta marroquí de autonomía. "¿Cuánto te paga Marruecos?", le dijeron, mientras enarbolaban una bandera de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD).
Los manifestantes, además, llamaron "vendeobreros" e "hipócrita" al jefe del Ejecutivo. Una acción que se repitió dos días después en un mitin en Burgos, en el que de nuevo enarbolaron la bandera del Sáhara Occidental, siendo expulsados por miembros de seguridad.
Un partido creado en 2018 y que creció al calor de los escraches
El partido se creó en octubre de 2018 y se dio a conocer en el ámbito nacional cuando en marzo de 2020 boicoteó una conferencia del entonces vicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias, en la Universidad Complutense de Madrid. Los militantes del grupo tildaron a Iglesias de "peón al servicio de grandes empresas y bancos". Ese mismo mes, increparon también al líder de Más País, Íñigo Errejón, acusándole de haber "dejado a los obreros en la calle" y aseguraban que "los obreros votan a Vox por algo".
También han sido especialmente incisivos con la exministra de Igualdad, Irene Montero, ya que el grupo se opuso siempre de manera frontal a sus políticas. En un acto de la anterior ministra en la ciudad de Murcia, un grupo de jóvenes de este movimiento obrero increparon a Montero y la acusaron, además de "vender a los obreros", de ser una "enchufada", pidiéndole que hablase de las "víctimas" del Ministerio de Igualdad. El Frente Obrero se opone de forma frontal a la Ley Trans y ha llevado a cabo campañas de pegadas de carteles por todo el país contra esta ley con el lema "el sexo biológico existe, la miseria de los trabajadores también".
Un movimiento "patriota revolucionario" y opuesto a la "inmigración masiva"
La formación se define como un movimiento soberanista y republicano, además de "patriota revolucionario", y aboga por la salida de España de la Unión Europea (UE) y del euro para que el país recupere su soberanía económica, monetaria y energética. Además, mantiene posiciones críticas con respecto a la inmigración masiva que, asegura, solo beneficia a los empresarios que buscan "mano de obra barata", y con las políticas LGTBI y lo que llaman la "ideología de género", ya que acusan al Gobierno de "tapar su abandono a la clase trabajadora" con esas medidas identitarias.
En materia económica abogan por la nacionalización de sectores estratégicos y por un incremento del intervencionismo del Estado en la economía y ponen el foco de sus políticas en la "defensa de los trabajadores de España", oponiéndose también a los nacionalismos periféricos y apostando por un "patriotismo obrero".