Hace exactamente 129 años, el 2 de enero de 1895, la ciudad de Valladolid inauguró su primera estación de ferrocarril, la Estación del Norte. Ubicada frente a la acera de Recoletos y levantada sobre unos terrenos, propiedad del Ayuntamiento, sobre los que anteriormente se encontraba un pequeño apeadero provisional de madera para recibir viajeros, la estación fue construida por el ingeniero francés Enrique Gasset y Echevarría. Si bien es cierto que en 1860 hubo un primer proyecto del ingeniero Lesquillier, que finalmente no llegó a realizarse. 

Las obras supusieron un coste de 591.575 pesetas y empezaron en 1891, siendo cuatro años después cuando se inauguró, convirtiéndose además en la primera estación de trenes de España con alumbrado de gas. 

Interior de la Estación del Norte de Valladolid Archivo municipal de Valladolid

Así lo narra el libro 'Tal día como hoy. Calendario histórico de Valladolid', de Roberto Delgado, que también recoge que el edificio, con planta en forma de U, está constituido por un pabellón central, dos cuerpos colaterales y dos pabellones extremos; que la entrada a la estación está formada por tres arcos de medio punto; y que la fachada principal, construida con piedra y ladrillo, se configura como un arco triunfal. 

A modo de curiosidad, esta cuenta con un escudo de la ciudad en la fachada principal, junto al que se encuentran dos esculturas de dos figuras femeninas de aproximadamente cuatro metros, que representan las dos actividades económicas principales de Valladolid en la época en la que fue construida la estación: la industria y la agricultura. 

La primera se muestra acompañada de una rueda dentada, mientras que la segunda porta una especie de colmena. Ambas fueron realizadas por el escultor madrileño Ángel Díaz. 

Vista general del edificio de la Estación del Norte y sus jardines en los años 70 Foto Santiago Archivo municipal de Valladolid

La primera remodelación de la Estación del Norte, hoy también conocida como estación Valladolid - Campo Grande, tuvo lugar en 1991, cuando se reordenaron los diferentes espacios que ya la conformaban, se inauguró un centro de viajes y se construyeron nuevas taquillas, una cafetería y un restaurante. 

Posteriormente volvió a ser remodelada en el año 2007, con motivo de la llegada del AVE a Valladolid. 

El alcalde junto con otras autoridades en 1983 durante la conmemoración del centenario del inicio de la construcción de la Estación del Norte Archivo municipal de Valladolid

Además, cabe destacar que actualmente Valladolid cuenta con un proyecto que convertirá a la Estación del Norte en una nueva estación de trenes acorde a las últimas exigencias, que no solo ganará en modernidad, sino también en funcionalidad. 

Tanto es así, que estará dotada de dos nuevos edificios, uno de oficinas y otro de viajeros. Además, el proyecto contempla la conexión peatonal de dicha estación con la de autobuses, actuaciones en la playa de vías y la adecuación de sus accesos y del aparcamiento exterior. 

Asimismo, tal y como especifica el anteproyecto, se dotará a la estación de más vías y andenes, mejorando también los accesos a los ya existentes; se habilitarán accesos, controles de seguridad y una calle peatonal y ciclista elevada; y se construirá un nuevo aparcamiento subterráneo que, al parecer, contará con 675 plazas, repartidas en una superficie de 25.556 metros cuadrados. 

Imagen de la nueva Estación Campo Grande-Valladolid Valladolid Proyecta

Dicho documento también recoge que la planta baja podría estar destinada a usos comerciales y de restauración, y las superiores a oficinas de Adif o coworking. 

Por su parte, la plaza de la estación contará con pavimento continuo, bancos integrados en el mismo, bastante vegetación, pérgolas ajardinadas y una iluminación mejorada. 

Las obras, que también incluyen la rehabilitación del edificio interna y externamente, están gestionadas por Adif y, al parecer, precisan de una inversión de 70 millones de euros. 

Servicios 

Actualmente, la Estación del Norte ofrece, a través de Renfe, servicios ferroviarios de pasajeros, con trenes de alta velocidad y larga distancia AVE, que conectan la ciudad con Madrid, Alicante, Palencia, León y Burgos; Avant, que la comunican con Segovia y Madrid; y Alvia, que trasladan al viajero a destinos como Madrid, Barcelona, Zaragoza, Asturias, Santander, Andalucía, País Vasco o la Comunidad Valenciana. 

A estos servicios se suman los de media distancia, los cuales conectan la ciudad con diferentes zonas de la región, así como con otras localizaciones externas como Madrid, Galicia, País Vasco y Cantabria. 

Viajeros esperando la salida de un tren en la estación Campo Grande de Valladolid M. Chacón ICAL