Este lunes, 8 de enero, el Ayuntamiento de Medina de Rioseco anunciaba que había tenido lugar la firma del contrato de explotación del edificio municipal El Torno. Los adjudicatarios son Carlos del Amo y Borja Martín para una nueva gestión cuya duración del contrato es de diez años que empiezan a contar desde este martes, 9 de enero.
El consistorio de la Ciudad de los Almirantes ha deseado mucha suerte en este proyecto empresarial a los dos jóvenes de 28 años que, hoy mismo, han recibido las llaves y se han mostrado sumamente ilusionados con su nueva aventura y con el proyecto que tienen en mente, del cual han dado detalles en una conversación con EL ESPAÑOL de Castilla y León.
El edificio municipal El Torno se trata de una antigua alhóndiga de los Almirantes que constituye un gran monumento de la arquitectura civil del siglo XVI. En sus orígenes se llamaba ‘El Diezmo’ y estaba destinado a recoger dicho diezmo de pan y también de vino. El 25 de diciembre del año 1992 se inaugura como ‘El Torno’ y se trata de un espacio evocador que se convierte en visita obligada para los que pasan por Medina de Rioseco.
Se sitúa en la Plaza del Corro del Asado del municipio vallisoletano y ahora, estos dos jóvenes de Villabrágima quieren comenzar con los trabajos para hacer un restaurante con discoteca en un espacio de 600 metros que quiere volver a tener cientos de visitas.
Dos amigos de toda la vida y un flechazo
“Somos dos íntimos amigos. Nos consideramos hermanos. Nos conocemos desde que comenzamos a andar. Desde que estábamos en la guardería. En este nuevo proyecto vamos juntos por esa amistad que guardamos desde hace años y años”, asegura Carlos del Amo en declaraciones a este periódico.
Carlos y Borja Martín, nacieron en Villabrágima y tienen 28 años. Van a hacer 29 en este 2024 que acaba de echar a andar. Se consideran gente emprendedora. De hecho, el primero cuenta con explotaciones ganaderas en diferentes puntos de Zamora, Palencia y Valladolid, en concreto de vacuno extensivo. El segundo de ellos cuenta con una explotación de pollos y con una tienda en Medina de Rioseco. Negocios con los que van a seguir pese al nuevo proyecto en El Torno.
“Pensamos en comenzar con un proyecto conjunto en Medina de Rioseco. La idea llega hace tiempo. Y dio la casualidad de que el Ayuntamiento sacó a licitación el contrato para El Torno. Fue pura casualidad. Un flechazo. Por ello nos lanzamos a la aventura y aquí estamos”, añade nuestro entrevistado.
Ambos cuentan ya con las llaves del lugar para comenzar con las labores de limpieza.
La idea de Carlos y de Borja
“Sentimos una felicidad tremenda. Nos llena de orgullo formar parte de la historia de un edificio como El Torno en Medina de Rioseco. Un lugar que fue una antigua alhóndiga y que después fue referencia en lo que a la fiesta se refiere. Era una antigua discoteca que cerró hace más de tres años, con la llegada del coronavirus”, explica nuestro protagonista.
Cuando el Ayuntamiento de Medina de Rioseco sacó el pliego de condiciones, los dos amigos se pusieron manos a la obra para elaborar un estudio previo para conocer al dedillo la normativa con el fin de montar una cocina, y de conseguir todas las licencias oportunas en lo que a la luz, el sonido y demás se refiere.
“Queremos mantener la memoria histórica del edificio y poner nuestro sello. Pensamos que en Medina de Rioseco hace falta un lugar para cenar. Queremos aprovechar una de las salas para abrir un restaurante y otra para una sala de fiestas. Que haya un restaurante y una discoteca en dos espacios diferenciados”, argumenta Carlos.
El nombre es secreto, añade, aunque anticipa que tendrá “una pincelada de Rioseco” y “otra de la amistad” que une a ambos emprendedores. Todo en un espacio que cuenta con 600 metros cuadrados repartidos en dos salas con un hall de entrada.
Abrir “cuanto antes”
“Lo más farragoso van a ser los baños y las escaleras con rampa que tenemos que colocar para que las personas con movilidad reducida puedan acceder al local. Queremos abrir lo antes posible pero las obras nos van a llevar unos meses”, añade Carlos.
Con las llaves en las manos de los dos jóvenes, ahora comienza la labor de limpieza y luego la de reuniones para que todo quede como ellos quieren. Sí que, como apunta nuestro entrevistado, la idea pasa por conseguir que este nuevo espacio quede a su gusto, y también al de sus potenciales clientes.
“Queremos devolver a El Torno lo que ha sido. Vamos a trabajar duro para que así sea los próximos diez años con el fin último, también de mejorarlo”, finaliza.
El Torno de Medina de Rioseco volverá a la vida en forma de lo que se espera que sea un gran restaurante con discoteca incorporada.