El Grupo Municipal Socialista y Valladolid Toma la Palabra han presentado, en la mañana de este miércoles, 24 de enero, una moción conjunta “en defensa de los valores democráticos” que llevarán el lunes, 29 del mismo mes, al pleno municipal que se celebrará desde las 9.00 horas.

Ambas formaciones han anunciado que se van a sumar a las movilizaciones del 10 de febrero y el portavoz de los socialistas en el consistorio, Pedro Herrero, ha responsabilizado al PP de “aceptar voluntariamente el lastre de Vox”.

La moción conjunta de ambas formaciones comienza asegurando que “nuestra democracia no ha caído del celo ni ha estado aquí siempre” y añade que “las libertades de las que hoy disfrutamos emanan de los sacrificios de una larga e intensa lucha social y política conta la dictadura”. Explican que “igual que se ganan, estos derechos y libertades, se pierden si no se resguardan de quienes los pretenden recortar o eliminar”.

Los dos grupos han explicado que “el regreso de la extrema derecha a nuestras instituciones”, eso sí, a través de los cauces democráticos pertinentes, “representa una amenaza” porque “buscan el paulativo y selectivo desmantelamiento” como “está sucediendo en Castilla y León y Valladolid”, añaden, con ambos gobiernos, el regional y el municipal, liderados por PP y Vox.

PSOE y Valladolid Toma La Palabra afirman que “el discurso de la ultraderecha es el de la crispación, el odio y el nacional populismo” añadiendo que “niegan la existencia de la violencia de género y el cambio climático”, todo ello, según ambas formaciones, “promoviendo la desinformación y manipulando la historia”.

“Si hay algo que molesta especialmente a la extrema derecha es la cultura, máximo exponente de la libertad, y por eso procura su control y su censura, tal y como reclamó el vicepresidente de la Junta de Castilla y León respecto a la Seminci y como se ha padecido en no pocos municipios de nuestro país e incluso de nuestra Comunidad Autónoma”, afirman estos dos partidos.

Por esto, ambas formaciones, con la celebración de la gala de los Premios Goya en Valladolid el 10 de febrero han asegurado que “en España debe saberse que Valladolid y Castilla y León están padeciendo estas políticas regresivas y que hay más de 40 colectivos sociales que levantan su voz contra ellas y en defensa de los principios y valores democráticos”.

Cargan contra Carnero

VTLP y PSOE han cargado contra el alcalde de Valladolid, el “popular” Jesús Julio Carnero, asegurando que “desde hace siete meses no emplea la expresión “violencia machista” y que “prefiere hablar de mujeres que han fallecido” en lugar de usar el término “asesinadas”.

Añaden que el nuevo gobierno municipal “no participa unido” en los actos institucionales “en materia de igualdad” ni tampoco “de derechos de las personas con independencia de su identidad y orientación sexual” ni “reconoce a las víctimas del franquismo” y apuntan que “se dispone a desmantelar el diálogo social.

“Un gobierno municipal que ha eliminado la concejalía de igualdad, ha reducido el presupuesto del plan de conciliación e inserción laboral para mujeres víctimas de maltrato y ha dividido de forma absurda el área de Cultura, aplicando recortes en el Teatro Calderón y el Museo Patio Herreriano, al tiempo que ha encarecido el alquiler Laboratorio de las Artes (Lava). Recortes también a la participación ciudadana, a las asociaciones vecinales, culturales y deportivas, a protección civil, a las políticas de vivienda, a bomberos, a infancia, el comercio de proximidad o el medio ambiente”, añaden.

Finalizan añadiendo que el gobierno de PP y Vox en el Ayuntamiento de Valladolid “atenta contra la salud pública” y que “se ha opuesto a la construcción de un Centro de Acogida de Protección Internacional para personas con derecho de asilo”.

Una moción con tres puntos

La moción que PSOE y Valladolid Toma La Palabra llevarán al pleno para su debate tiene tres puntos. El primero de ellos pide “apoyar las movilizaciones sociales” del 10 de febrero “en defensa de los principios y valores democráticos”. El segundo: “convocar el Observatorio Municipal de Derechos Humanos” y, por último, “rechazar todas las políticas públicas que se puedan desarrollar en el ayuntamiento” que “supongan el menoscabo de los derechos humanos”.