“La plataforma nace en marzo de este año, cuando nos enteramos de la intención de la empresa Ingeniería Libergia S.L. de instalar una macroplanta de biometano en el término municipal de Montemayor de Pililla”, asegura, en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León, Susana una de las mujeres que forman parte de dicha agrupación.
La plataforma la conforma un grupo heterogéneo de vecinos de Montemayor y pueblos colindantes, con más de un centenar de miembros a la que, como nos confirma nuestra entrevistada, “cada día se suma alguien más”.
“Cuando nos informamos y nos dimos cuenta de las dimensiones del proyecto saltaron las alarmas. Hablando, entre unos y otros, decidimos organizarnos para poder gestionar nuestra protesta”, asegura Susana.
De hecho, han comenzado con una iniciativa en Change.org en contra de la instalación de esta planta de biogás. En un primer momento, la iniciativa inicial era la de recoger firmas de forma tradicional, en papel, pero después consideraron que dicha macroplanta “no solo perjudicará a los vecinos de Montemayor” sino también “a los de los pueblos colindantes”, por lo que consideraron “más efectivo y sencillo para las personas que están en contra” mostrar su apoyo a través de la firma en Change.org, dentro de la petición: “No a la Macroplanta de Biometano en Montemayor de Pililla”, que acumula, a día de hoy, 982 firmas.
“Ya tenemos casi 1.600 firmas entre las de Change.org y las tradicionales en papel y subiendo. Estamos empezando y aún nos queda mucho por hacer”, asegura Susana, convencida.
Posible ubicación y pueblos afectados
“La quieren instalar a 3,5 kilómetros del casco urbano de Montemayor de Pililla, a 3 kilómetros del casco urbano de Santibáñez de Valcorba y a 4,7 de Traspinedo, por poner algunos ejemplos. En el pago ‘El Cabezo’, dentro del término de Montemayor. Pueblos, todos ellos, dentro de la zona vulnerable a la contaminación de aguas por nitratos, declaradas en el Decreto 5 / 2020 del 25 de junio”, explica nuestra entrevistada hablando de la localización.
Sobre los pueblos que podrían verse afectados, en total, sería Santibáñez de Valcorba, Traspinedo, Camporredondo, Viloria del Henar, Torrescárcela, Cogeces del Monte y personas de San Miguel del Arroyo que también han brindado su apoyo a la plataforma al “sentirse perjudicados”.
“El intenso tráfico de camiones pesados cargados con purines, estiércol y muchos residuos orgánicos por el casco urbano de todos estos municipios, van a condicionar nuestra vida, salud y entorno”, apunta Susana.
Sobre los posibles efectos nocivos de esta planta, afirman que “son muchos y muy graves” debido a la “envergadura del proyecto”. Por un lado, el volumen de tráfico “degradaría carreteras y caminos los 365 días del año que pretenden trabajar”. También destaca, nuestra protagonista “los olores de basuras o el ruido”.
“Si ya sufrimos una despoblación alarmante, ¿quién en su sano juicio va a querer venir a vivir aquí?, ni siquiera se lo van a plantear. Ya mucha gente que hace poco se ha comprado casa en Montemayor se nos han acercado alarmados pensando que han tirado su dinero, y ni siquiera han comenzado con el proyecto”, añade.
Oposición frontal
“Creemos que les gustaría comenzar a construir a primeros del año próximo, pero para ello primero tienen que presentar el proyecto y conseguir que la Junta les apruebe la solicitud de la Licencia Ambiental”, explica Susana. La extensión aproximada de esta macroplanta, como añade nuestra entrevistada, “será de unas 9 hectáreas”.
Desde la plataforma han mostrado su “oposición frontal a la macroplanta de biogás por su tamaño y localización”. Apuntan que es “excesivamente grande y la cantidad de materia prima la tienen que traer de fuera para poder alimentarla”.
“Para ponerle una solución a algo, primero tiene que existir un problema, y en Montemayor de Pililla y los pueblos colindantes no lo tenemos. Los residuos ganaderos se han gestionado siempre de forma tradicional y son muy apreciados por los agricultores para aumentar la materia orgánica en sus campos. No es lógico que en zonas como la nuestra tengamos que sacrificarnos instalando macroplantas de gas Metano cuando el residuo se está generando en otros lugares. Lo lógico sería que estas plantas, bien dimensionadas, por supuesto, se instalen en los lugares donde se generan grandes cantidades de purines y estiércol”, añade.
Susana confiesa que el Ayuntamiento de Montemayor “está proponiendo la instalación de la planta” y que “les han comunicado su rechazo”, todo con el objetivo de que “la empresa desista en su intento de instalar la macroplanta cuanto antes” para “poder volver a dormir tranquilos”.