José Carlos Rodríguez, catedrático de la Universidad de Valladolid y fundador y director del Grupo de Investigación Reconocido Bioforge, ha sido reconocido por la Unión Internacional de Sociedades para la Ciencia e Ingeniería de Biomateriales (IUSBSE) con uno de los más altos reconocimientos en esta área, reservada para unos pocos.
Ha sido sido distinguido como Fellow of Biomaterials Science and Engineering (FBSE) por la Unión Internacional de Sociedades para la Ciencia e Ingeniería de Biomateriales (IUSBSE) durante el Congreso de Biomateriales celebrado el pasado mes de mayo en Daegu (Corea del Sur). Este prestigioso honor internacional se otorga a científicos que han realizado contribuciones excepcionales en el campo de los biomateriales. "Ser nombrado FBSE es uno de los más altos reconocimientos en esta área científica, reservado para aproximadamente un 5% de los investigadores de esta área a nivel mundial.
"Es un honor que la mayoría de colegas a nivel internacional hayan pensado en mi para recibir esta distinción", agradece Rodríguez Cabello. Actualmente en España, tan solo el investigador de la UVa José Carlos Rodríguez y María-Pau Ginebra, investigadora de la Universitat Politècnica de Catalunya, cuentan con esta distinción internacional como investigadores en activo. El investigador Rodríguez Cabello es pionero a nivel mundial en la ciencia de los biomateriales, y más concretamente en la reducción de la brecha existente entre la ingeniería genética, la biotecnología y la ciencia de biomateriales.
Con títulos en Química (Bioquímica) y Física (Física de la Materia Condensada) de la Universidad de Valladolid, su sólida y diversa formación académica ha sido clave para su investigación innovadora sobre polipéptidos recombinantes. Estos polipéptidos recombinantes son cadenas de aminoácidos que se producen utilizando técnicas de biotecnología, específicamente a través de la ingeniería genética.
"La innovación por la que se me reconoce radica sobre todo en la ruptura con materiales utilizados tradicionalmente en medicina como plásticos o polímeros y la sustitución de estos por biomateriales diseñados a medida para aplicaciones médicas", explica el fundador del BIOFORGE. Además, ha sido muy valorado por los científicos a nivel internacional no solo la innovación, sino también el camino recorrido en un lapso muy breve de tiempo.
"Hace unos 15 años, 20 a lo sumo, que comenzamos por la base, investigando estos nuevos biomateriales. Y desde entonces hemos recorrido todo el camino desde el laboratorio hasta la industria, ya que actualmente los materiales desarrollados a lo largo de estos años están en fase de pruebas preclínicas, muy cerca ya de ser testados en humanos", contextualiza el investigador. Estos materiales desarrollados en el seno del BIOFORGE permitirán en un futuro próximo tratar diversas patologías, incluidas algunas para las que actualmente solo existen cuidados paliativos como la reparación del corazón infartado.
Permitirán también el desarrollo de nuevos sistemas de válvulas cardíacas, reparación de tejido óseo y cartilaginoso, curación de heridas recalcitrantes comoi las de los enfermos de, por ejemplo, diabetes o grandes quemados; regeneración de heridas musculares o de superficie ocular como la córnea. "Probar la infinidad de aplicaciones de los materiales desarrollados ha sido posible gracias a una extensa colaboración internacional. Este trabajo conjunto con colegas de medio mundo nos ha permitido dar respuesta a patologías muy diferentes y, sin duda, ha contribuido enormemente en que pensasen en mi para este reconocimiento", agradece el investigador de la Universidad de Valladolid. Todo este trabajo de ciencia básica y aplicada se traduce en la publicación de más de 250 artículos en revistas indexadas y la solicitud de 15 patentes por parte de José Carlos Rodríguez Cabello y su equipo.
Cinco de estas patentes están actualmente en uso y su influencia es más que tangible en la vanguardia tecnológica de la ciencia de los biomateriales. Además, el investigador de la Universidad de Valladolid ha cofundado y es CEO de Technical Proteins Nanobiotechnology SL, una empresa dedicada entre otras cosas al diseño de péptidos o al desarrollo de Micro y Nanoplataformas para la Entrega Controlada de Medicamentos. Además, es cofundador y Asesor Científico Principal en CellDrive 3D S.L., promoviendo la aplicación de sus investigaciones en medicina regenerativa, nanomedicina y nanotecnología.