Los retrasos en los trenes volvieron a ser los protagonistas de la jornada del miércoles en la estación de Chamartín, por una nueva avería que, en esta ocasión, ha afectado a varios trenes, lo que hizo que las instalaciones permaneciesen colapsadas durante horas y en un ambiente de caos absoluto.
Y es que, dos de los trenes perjudicados, se trataban de Avant con destino Valladolid. Tal y como confirmó Adif en sus redes sociales, la incidencia se debió a "la falta de tensión, originada por un tren sin pasajeros, que enganchó su pantógrafo en la catenaria cuando circulaba para estacionarse en la vía".
Aunque desde Renfe y Adif señalaron que los operarios se encontraban trabajando para poder solventar las incidencias y que todos los pasajeros pudiesen llegar a su destino "a la mayor brevedad posible", lo cierto es que, decenas de personas que tenían previsto viajar hasta la estación de Campo Grande a lo largo de la tarde, vieron retrasado su viaje durante más de 70 minutos.
De hecho, hay quien hasta ha tenido que esperar hasta este jueves para poder viajar a la ciudad, viendo retrasada su llegada a la ciudad del Pisuerga 16 horas. "Valladolid. Conseguido. Llegada prevista, miércoles 24 de julio a las 19:15 horas, llegada, jueves 25 de julio a las 11:27 horas. Ya es más fácil entrar ilegalmente a España que viajar en Renfe de Madrid a Valladolid", ha expresado un usuario en X.
Lo peor es que, tal y como ha revelado alguno de los pasajeros afectados a través de sus respectivas redes sociales, la espera fue "horrorosa", por las temperaturas extremas que se registraron en la propia estación de Chamartín. Así, según han confirmado varios de los damnificados, tuvieron que esperar más de una hora en un ambiente de calor extremo que alcanzaba los 50 grados. De hecho, según ha podido saber este medio, se produjo algún desmayo por la temperatura a la que los viajeros se vieron obligados a esperar a que la avería fuese resuelta.
Pero esto no es todo. Tal y como ha podido confirmar este periódico en conversaciones con un testigo, muchos de los viajeros tuvieron que realizar el trayecto a Valladolid en un tren Cercanías, cuyo uso está limitado a la provincia de Madrid. "Metieron a los pasajeros de varios Avant en el mismo Cercanías", ha explicado.
Además, dado que un Cercanías no puede circular por las vías destinadas a los trenes de Alta Velocidad, este tuvo que realizar su recorrido "por Ávila, donde hizo una parada para volver a suministrar agua a los pasajeros".
Así, tras casi tres horas de viaje y cuando el reloj marcaba las 00:05 horas, los pasajeros con billetes de tren a Valladolid lograron llegar a su destino. "La gente venía muy cansada", ha explicado un testigo que quedó tremendamente asombrado cuando, de pronto, vio cómo un tren de Cercanías accedía a la estación de Campo Grande por la vía 4.
"Me niego a pasar otra jornada encerrada en un tren"
Por otro lado, cabe destacar que los pasajeros de un tren Media Distancia con trayecto Madrid - Salamanca también se resultaron perjudicados por otra incidencia que nada tuvo que ver con la anterior.
Según ha revelado a este periódico la senadora del PP por Salamanca, Esther del Brío, ella misma sufrió las consecuencias de este altercado, que consistió en un robo de cable "entre El Escorial y Zarzalejos", que provocó que el tren saliese con 70 minutos de retraso.
"Primero nos pararon como media hora entre ambos trayectos y luego avanzamos a velocidad de maniobra unos 20 kilómetros y nos volvieron a parar, porque solo se podía usar una vía", ha relatado.
Entonces, se vieron obligados a esperar a que pasaran otros trenes, sin llegar a recuperar la velocidad normal hasta el paso del tren por Herrador de la Cañada.
"Yo seguía otras incidencias en redes sociales, donde la gente no tenía aire acondicionado ni asiento y en comparación no me sentía tan mal porque teníamos aire y había asientos libres. Nadie perdió la paciencia y el revisor nos informaba de lo que iba sabiendo", ha añadido.
Sin embargo, si ha criticado el hecho de que las máquinas expendedoras no funcionasen, ya que esto les impidió poder comer o beber algo. "Hoy tenía que viajar otra vez y me he venido en bus. Me niego a pasar otra jornada encerrada en un tren", ha añadido la senadora, aprovechando la ocasión para cargar contra el Gobierno por su gestión de los servicios públicos: "Es una vergüenza lo que están haciendo, a pesar de tener millones en fondos europeos y deuda pública", ha apostillado del Brío.
Por su parte, un gran número de usuarios han recurrido a sus cuentas oficiales de X para publicar imágenes y vídeos de lo que para ellos ha supuesto una auténtica odisea, y junto a las que han escrito varias críticas al misnistro de Transportes, Óscar Puente. "Deje por un rato de criticar a los jueces y ponga solución al desastre en el que se ha convertido Renfe", "Suma y sigue el desastre de Óscar Puente al frente de Renfe, "Ministro, dimite hoy mismo si tienes dignidad" o "Necesitamos soluciones ya", son algunos de los comentarios que se pueden leer en la citada red social.