Aprovechando la actuación de Pablo Hermoso de Mendoza en el coso de Íscar durante las pasadas ferias, charlamos con él en su año de despedida de los ruedos tras 35 años de alternativa y más de 40 como rejoneador.
Hemos extraído este texto de la entrevista que hicimos para el programa taurino Grana y Oro, de Cyltv:
P.- ¿Qué ha significado para ti estos 40 años de rejoneo?
R.-Toda una vida dedicada a la profesión, dedicada a mi pasión también, que es el toreo a caballo. Y ahora, cuando uno mira hacia atrás, pues yo creo que no ha podido ser más bonito. En ese camino recorrido donde ha habido todo tipo de triunfos, también ha habido fracasos, ha habido equivocaciones, pero esas son enseñanzas que a uno le quedan para siempre.
P.- El caballo que te compró tu padre cuando tenías 17 años ¿Lo recuerdas aún con cariño?
R.- Sí, primer caballo fue “Cafetero”, un caballo que me compró mi padre, pero no pensando en torear, sino pensando en tener un caballo para que yo aprendiera a trabajar con él, a hacerle la doma. Y bueno, pues luego sería mi primera estrella aquel “Cafetero”, un caballo de quiebros que cuando le salían era una maravilla, pero cuando no salían pues por ahí escapábamos como podíamos…
P.- No nos resistimos a preguntarle a Pablo aquello de ¿Detrás de un gran caballo hay un gran jinete, o al revés?
R.- Lo bonito es que cuando hay un gran caballo haya un gran jinete, ¿no?
A veces no se ponen de acuerdo. Y es una pena, porque hay caballos que se quedan sin verse. Lo que podían haber sido por no haber dado con esa persona que lo entendiera y que lo interpretara. Y también al revés; un jinete, por muy bueno y muy hábil que sea, cuando no tiene buenos caballos no puede brillar a su nivel.
P.- ¿Qué recuerdas de aquellos caballos tan importantes? Sobre todo de “Cagancho”.
R.- Ahora es el momento inevitable de pensar un poquito en todo lo que me ha acompañado: aficionados compañeros, cómo no, caballos. También colaboradores en la cuadra, en el cuidado de esos caballos. Y bueno, pues a todos ellos mi agradecimiento. Y entre los caballos, pues la verdad es que recuerdo a todos con un gran cariño, pero indudablemente hay unos que resaltan mucho más, como es el caso de Cagancho, Chenel, Berlín, Disparate Pirata, Labrit. Pero bueno, Después de hasta más de 100 caballos que han toreado conmigo todos están muy latentes en mi recuerdo.
P.- Estamos en Íscar, en el sitio, entre otros, donde te iniciabas en el mundo del rejoneo ¿Qué recuerdas de esta plaza?
R.- Sí, hoy toreo aquí, y es una plaza que le tengo un cariño especial porque en mis principios ya se me dio oportunidad de presentarme en ella cuando yo todavía no era figura del toreo ni era muy conocido. Y después, cuando ya triunfé, venía cada año. Además es una tierra muy de caballos, una tierra donde se hacen muchos encierros y entonces la gente chanela de lo que ve en la plaza. Muchos se han puesto delante de un toro a caballo y saben la dificultad que conlleva todo ello.
P.- El público y los aficionados te aclaman y te reclaman en los ruedos. Elige un público que te haya impactado a lo largo de estos 40 años.
R.- La verdad es que me han apoyado los públicos de distintos lares y de casi todos los sitios. Pero me atrevería a decir que en estos últimos años, quizás Campo Pequeno, la plaza de Lisboa es en la que me he sentido muy identificado con el toreo que yo hago. Pero indudablemente luego está Pamplona, mi plaza querida, donde yo crecí. Está la Monumental México, una plaza donde he cosechado triunfos y momentos entrañables. Está Bayona, está Nimes. Bueno, cantidad de ellas, pero es que diría todas, la verdad.
P.- Y hablando de México
R.- Sí, España fue el primer país donde me cuajé, donde tuve el reconocimiento, pero luego llegó el momento de internacionalizarme. Y bueno, pues yo creo que México me dio ese plus a mi carrera de número de corridas, de éxitos, de una vida social también diferente a la que yo viví aquí en España. Conocer la idiosincrasia de otro país donde viví y vi crecer a mis hijos y pasé pues largos periodos de mi vida.
P.- ¿Estás conforme con lo que te ha dado el rejoneo o te ha faltado algo?
R.- Estoy pleno con lo que me ha dado mi vida profesional. Agradecido a ella enormemente. Y creo que yo seguiré buscando ese plus, ese poquito más de arte que siempre estamos buscando y no encontramos. Y bueno, la vida se me quedará corta en esa búsqueda, pero la verdad estoy pleno con todo lo que me ha dado el toreo.
P.- Finalmente, Pablo nos contaba sus proyectos tras dejar el rejoneo activo.
R.- Sí, a partir de ahora entro en una etapa nueva de mi vida. En principio una que ya que estoy disfrutando mucho, que es la carrera de mi hijo Guillermo, acompañarlo, seguirlo, intentar también aportarle todo lo que yo pueda en cuanto a técnica y entendimiento de esta fiesta. Pero también hay una ganadería detrás, hay una familia, hay una finca, hay todo; unos proyectos que se iniciaron hace años y que ahora espero dedicarles un poquito más de tiempo.
Pablo, muchísimas gracias por atendernos. Muchísima suerte en lo que te queda por torear en tu año de despedida y larga vida, maestro.
Les ofrecemos una amplia galería de fotos del gráfico medinense Fermín Rodríguez.