La Guardia Civil de Valladolid ha investigado a dos personas por presuntos delitos relacionados con la protección de la fauna, específicamente por tráfico de especies protegidas en peligro de extinción. En el marco de la Operación MARFISE, llevada a cabo por el Seprona de Valladolid en colaboración con la Unidad Central de Medio Ambiente de Madrid, ha tenido como epicentro la comercialización ilegal de marfil de elefante africano.
Las investigaciones comenzaron en abril, cuando los agentes detectaron que en la provincia de Valladolid se estaban vendiendo numerosos lotes de objetos, figuras y joyas elaborados con colmillos de marfil de elefante africano a través de anuncios en páginas de Internet. Estos productos eran posteriormente distribuidos mediante diferentes empresas de paquetería.
Durante el operativo policial, se incautaron 14 piezas de marfil y pelo de elefante, con un valor estimado de 7.410 euros en el mercado negro. El daño económico a la fauna silvestre a nivel internacional se estima en 1.575.000 euros. La operación continúa abierta mientras se esperan los resultados finales de las investigaciones.
El elefante africano (loxodonta africana) y sus partes, incluyendo productos derivados, están protegidos por el Anexo I de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES) y el Anexo A del Reglamento (CE) nº 338/97 del Consejo de la Unión Europea. La comercialización de estos productos está prohibida, salvo excepciones reguladas por dicha normativa.
El tráfico ilegal y el furtivismo de vida silvestre son consideradas como una de las mayores amenazas para la biodiversidad mundial. En respuesta, la Unión Europea ha implementado un Plan de Acción para combatir este tráfico ilegal, siguiendo el llamamiento de la ONU para enfrentar esta problemática. Este esfuerzo global busca poner fin a estas actividades ilegales y es una de las diez prioridades del Ciclo de Política de Seguridad de la Unión Europea, en la que la Guardia Civil es colíder a través de la plataforma EMPACT.
El operativo contó con la colaboración de la Unidad Técnica de UCOMA de la Guardia Civil de Madrid y la Subdirección General de Biodiversidad Marina y Terrestre del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Las diligencias instruidas, junto con el material intervenido, han sido puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Valladolid.