Tordesillas viaja al pasado con la instalación de dos portadas en su plaza Mayor

El Ayuntamiento de Tordesillas ha colocado recientemente en su plaza Mayor dos portadas con las que pretende recuperar el espíritu que tenía este emplazamiento hasta los años 80, cuando se celebraban en él los festejos taurinos de las fiestas patronales.  

"La intención de este equipo de Gobierno es recuperar el espíritu de las portadas y el ambiente de la plaza. Por eso, este año hemos decidido montar dos portadas para que los más pequeños y jóvenes sepan que es lo que eran", ha confesado el alcalde, Miguel Ángel Oliveira. 

Este también ha anunciado que en un futuro el Ayuntamiento pretende estudiar la posibilidad de completar la plaza con más portadas como se hacía antaño "y poderlas subastar".

"Durante el periodo de fiestas actualmente es inviable su colocación, dada la actividad que tiene la plaza Mayor durante estos días. Por ello, estudiaremos con las pandas y con los establecimientos poder realizar esto en un periodo fuera de las fiestas patronales", ha añadido. 

Según han dado a conocer desde el Consistorio, las portadas son parte de una tradición muy arraigada en el municipio que se remonta a 1557, cuando la plaza Mayor de la Villa se convertía en una plaza de toros de formato rectangular y, con ello, en el epicentro de las fiestas. 

Explican que el ‘Día de las Portadas’ suponía la subasta de cada uno de los cuarenta espacios entre postes –portadas- que existían en la plaza Mayor. El Ayuntamiento era el encargado de organizar dicha puja y el dinero recaudado era destinado a sufragar los gastos de esos días festivos. Si alguien no cubría la cuota mínima de la portada, esta solía quedar en manos del Ayuntamiento.

La portada más pequeña era la 38, a la altura de la oficina de Pastelería Galicia, mientras que la 1 y la 4 eran las más grandes, a las puertas de la Calle de Santa María.

El tablajero, la persona encargada de elaborar las portadas y que pujaba por ellas, alquilaba a las peñas y personas particulares los conocidos ‘palos’ de cada portada, para que así pudiesen presenciar los festejos de esos días.

La numeración arrancaba en el número uno. En la actualidad, este estaría ubicado a la entrada de la calle San Antolín. Su formato cuadrangular y bajo sotechado de la plaza, permitía a los espectadores permanecer a resguardo en las tardes lluviosas de toros. 

Dicha tradición perduró hasta 1979, siendo este el último año en el que se subastaron las portadas con Don José Elías Pérez Barragán como nuevo regidor.

1980 fue un año fatídico para Tordesillas, pues el derrumbe de la plaza Mayor producido por los inmuebles de la Calle San Antolín 1-3, obligó a trasladar los festejos, los cuales, según han revelado desde el Ayuntamiento, pudieron celebrarse al buen hacer Laguna de Duero, que un día antes de que terminaran sus fiestas, cedió su plaza portátil a la villa.