“Ha sido un comienzo del negocio duro. No queríamos fallar y hemos estado como pollo sin cabeza. Queríamos tener todo controlado y dar a nuestros clientes el mejor servicio posible”, asegura, en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León, Vanessa González Rueda.
Ella, de 45 años, es una de las dos patas, junto a su madre Yolanda Rueda Medina, de 66 años, del conocido negocio que se ubicaba en la Plaza Cruz Verde número 2 de Valladolid, y que lleva el nombre de ‘Yoli y yo Pollos Asados'.
Un negocio que arrancó hace 12 años. Lo montaron los padres de nuestra entrevistada, por aquel entonces. Comenzaron ellos y Vanessa les intentaba ayudar.
“Cuando falleció mi padre decidí, con mi madre, continuar con el negocio para sacarlo adelante. Yo me quedé con ella y, entre las dos, hemos ido avanzando. Hemos estado en el local de Cruz Verde, muy cómodas, 12 años”, apunta.
A finales del mes de agosto se trasladaron de local. En el antiguo, el edificio “está muy viejo y las dueñas decidieron no renovar contrato a ninguno de los inquilinos de al lado” y “de la noche a la mañana te ves en la calle sin un local en el que trabajar”, afirma nuestra protagonista.
Han tenido que luchar mucho, madre e hija, con el fin de encontrar un local que tuviera salida de humos para sacar adelante el negocio y que no muriera tras muchos años de trabajo.
“A la desesperada llamé a este local. Era una cervecería y al decirme que tenían salida de humos nos lo quedamos. Pensábamos que teníamos que irnos del barrio y dejar de trabajar en esto buscando otra alternativa. Al final todo ha ido bien”, añade Vanessa.
Apunta que “les ha costado mucho la reforma y acondicionar el local” con salidas de humos, campanas extractoras y demás, pero lo han conseguido gracias a la ayuda de socios del Motoclub La Leyende Continúa que les han ayudado para completar el traslado.
“Los clientes, al estar en la calle paralela, han respondido muy bien. Están los fieles, viene gente nueva… Nos sorprende y estamos muy contentas. A la gente le encanta el nuevo local y el aire que le hemos dado”, añade Vanessa. El local tiene 60 metros cuadrados y está situado muy cerca del anterior negocio. Se ubica en la calle Acibelas 18 y ahora lleva el nombre de Gastrobar Dónde Vane Asador de Pollos.
“Nos damos con un canto en los dientes. Lo que pensábamos que iba a ser imposible, vemos que sí que se puede. Tenemos todas las ganas y estamos muy bien”, añade.
Los pollos, patatas y demás productos de ‘Yoli y yo pollos Asados’ se pueden seguir disfrutando, por suerte, en Valladolid, ahora, con otro nombre en el negocio.