La Guardia Civil de Valladolid ha tenido que auxiliar a una familia en el término municipal de Cabezón de Pisuerga, el pasado jueves, 26 de septiembre.
Una mujer, madre de un bebé de 12 meses, llamaba asustada a los agentes tras el cierre accidental de las puertas de su vehículo, en las inmediaciones de un área de descanso, de la autovía A62.
Al parecer, la mujer paró para hacer un descanso y cuando salió del vehículo el fuerte viento provocó el cierre de la puerta, con la mala suerte de que las llaves quedaron dentro, al igual que el bebé.
Los agentes, viendo la delicada situación procedieron a activar el protocolo pertinente, además de gestionar el servicio de asistencia en carreteras.
También, se prepararon para fracturar uno de los cristales del turismo, sin embargo, pasados 15 minutos la grúa del servicio de asistencia en carretera se personó en el lugar de los hechos.
Ayudados de dilatadores y herramientas, lograron la apertura del vehículo de manera exitosa, por lo que, finalmente, no tuvieron que romper el cristal.
Una vez que comprobaron el estado del menor, pudieron ver que tenía síntomas de agotamiento por el calor, pero afortunadamente se encontraba con buen estado de salud. Se le suministró agua y la madre lo tranquilizó.
Después de que los agendes se cerciorasen de que ambos no requerían nada más, la mujercilla continúo su viaje con el pequeño.