El alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, ha entregado este sábado la Medalla de Oro de la Ciudad a la Policía Nacional en la Plaza Mayor.

Un acto que se ha celebrado con motivo de la festividad de los Ángeles Custodios, patronos del Cuerpo, que ha contado con la asistencia de toda la corporación municipal, autoridades civiles, académicas y militares y ciudadanos.

El comisario principal Juan Carlos Hernández Muñoz, jefe superior de la Policía Nacional, ha sido el encargado de recoger la distinción que fue aprobada en el Pleno del pasado 25 de marzo por unanimidad.

Una recompensa honorífica por la "importante labor que ha desarrollado la Policía Nacional en Valladolid desde su implantación, ejerciendo los derechos y libertades de los ciudadanos y garantizando su seguridad".

En este sentido, Carnero ha puesto en valor la "encomiable vocación de la Policía Nacional, su inestimable entrega y su compromiso con la ciudad".

Del mismo modo, también ha agradecido la "predisposición de la Policía Nacional para colaborar con la Municipal desarrollando un trabajo conjunto, coordinado y eficaz". Aunando esfuerzos para "incrementar la seguridad en beneficio del ciudadano". 

“Pero no es solo cuestión de cercanía y cariño, sino que trabajamos conjuntamente”, señaló Carnero, lo que hace de Valladolid “una de las ciudades más seguras de España” a través de la labor de la Sala Conjunta, de la que destacó la atención a las víctimas de violencia de género.

El jefe Superior de Policía de Castilla y León, Juan Carlos Hernández, durante el acto de entrega de la Medalla de Oro de la Ciudad de Valladolid a la Policía Nacional Rubén Cacho Ical

Una Medalla de Oro que ha tildado como un "acto de ciudad" por el "trabajo, compromiso y buen hacer" de los agentes.

Esta distinción adentra a la Policía Nacional en un "grupo selecto" donde se encuentran, entre otros, la Cámara de Comercio, la Academia de Caballería, el Servicio de Extinción de Incendios, Concha Velasco, Lola Herrera o José Jiménez Lozano.

Por todo ello, matizó que los agentes de la Policía Nacional forman parte de "uno de los ámbitos más encomiables de la función pública" junto a médicos, maestros y bomberos.

Y terminó agradeciendo su "vocación de servicio público" para que los ciudadanos sean “más libres, más iguales, más prósperos y desarrollados”.