La XLIV Semana Social de España ha finalizado este sábado en Valladolid tras sus dos jornadas de reflexiones y debate bajo el lema ‘El diálogo, camino para la Iglesia’ que se han celebrado en el Patio Herreriano Museo de Arte Contemporáneo Español y en el Centro de Espiritualidad 'Corazón de Jesús'.
Este encuentro terminó con la lectura del documento conclusivo, leído por el presidente de Semanas Sociales, Jesús Avezuela.
En ellas se propone, en primer lugar, elevar la oración y renovar el compromiso con los pueblos de España, especialmente el valenciano, afectados por las inundaciones que tanta muerte y destrucción ha generado.
También se valoró "la participación en los encuentros preparatorios realizados por 25 diócesis e instituciones de la Iglesia en España en los últimos meses".
Así como "las sesiones de trabajo con espíritu sinodal y deliberativo, potenciando la escucha y acogiendo con hospitalidad y generosidad la pluralidad de sensibilidades de la vida pública y eclesial".
El encuentro finalizó con las palabras del cardenal Juan José Omella, consiliario de las Semanas Sociales de España, quien señaló la importancia del diálogo. Al finalizar se rezó por el religioso franciscano fallecido por un acto violento en el monasterio de Gilet en Valencia.
Un acto donde el diálogo ha sido el tema central. De esta forma, el nuncio apostólico en España, Bernardito Auza, reflexionaba sobre la importancia que tiene para "descubrir las riquezas y dignidad de cada ser humano".
Así como "valorar lo que nos une y ver las diferencias como oportunidades de crecimiento". No solo eso, sino que también ha invitado a fomentar ese diálogo de manera paciente y confiada.
Un evento en el que este sábado ha participado Francisco Igea, el profesor Fernando Vidal y el periodista Antonio San José en una mesa redonda para hablar sobre 'El valor del diálogo'.
San José ha pedido que la Iglesia tome "su papel protagonista sin el miedo al que dirán" e Igea ha abundado en la idea de "poner la oreja donde está el grito de la gente".