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Valladolid se convertirá este fin de semana en escenario de la batalla política entre los dos grandes partidos de España. El Partido Popular llevará a cabo una auténtica exhibición de músculo y poder territorial en la Intermunicipal que tendrá lugar en la ciudad y que contraprogramará al Congreso Federal del PSOE en Sevilla.

El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, acudirá a la cita vallisoletana con la clara intención de contraponer la unidad y la implantación de su partido en el territorio con la debilidad de un PSOE en sus horas más bajas, asediado por las acusaciones de corrupción y con profundas grietas en Castilla y León y Madrid.

Un PSOE en horas bajas

Los socialistas celebrarán su cónclave en Sevilla en un momento de máxima tensión después de que el ya ex secretario general del PSOE de Madrid, Juan Lobato, dimitiese este miércoles después de la fuerte presión interna y de denunciar el "linchamiento" que asegura haber sufrido por parte de su partido.

Todo ello después de conocerse que Lobato registró en una notaría una serie de chats de WhatsApp relacionados con los presuntos delitos fiscales del novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y cuya posesión le colocó en el disparadero político hasta que, finalmente, presentó su dimisión este miércoles.

Además, la herida abierta en Castilla y León aún no ha cicatrizado y la inmensa distancia entre Ferraz y la dirección autonómica, encabezada por un débil Luis Tudanca, se hará notar en el cónclave sevillano, en el que el PSOE de León, encabezado por el crítico Javier Alfonso Cendón, ganará protagonismo.

La cancelación de las primarias autonómicas, que Tudanca había adelantado para tratar de mantenerse en el cargo, por parte de la dirección federal, provocaron el estallido de una guerra abierta que se encuentra en una momentánea tregua, pero en la que no se ha llegado a un armisticio.

El descontento en la cúpula socialista con el dirigente del PSOE de Castilla y León es de sobra conocido y la apuesta de Ferraz para sustituirle, tras las primarias que finalmente se celebrarán a principios de febrero de 2025, es el incombustible alcalde de Soria, Carlos Martínez. Está por ver si el regidor dará el paso.

Por otro lado, el PSOE se encuentra asediado por la declaración del conseguidor de la trama Koldo, Víctor de Aldama, ante el juez, en la que se autoinculpó de múltiples delitos e implicó en ellos a parte de los ministros del Gobierno de Pedro Sánchez además de a cargos de la formación.

Además, sigue muy presente la investigación contra la mujer de Sánchez, Begoña Gómez, después de que aportase al juez Juan Carlos Peinado varias pruebas de cargo de que María Cristina Álvarez, la directora de Programas de la Secretaría General de Presidencia, en realidad trabajaba como asistente personal suya.

Unas pruebas autoinculpatorias que señalaban que era esta alta funcionaria la que se ocupaba del día a día de la cátedra extraordinaria y del máster de Transformación Social Competitiva que codirigía la mujer del presidente del Gobierno en la Universidad Complutense de Madrid (UCM).

Además, este miércoles un juzgado de Badajoz ha imputado por presunta malversación al hermano del presidente del Gobierno, David Sánchez, en el marco de una causa en la que se investiga un trato de favor en su acceso al puesto de jefe de la Oficina de Artes Escénicas, un ente dependiente de la Diputación de Badajoz.

Por otro lado, las dificultades legislativas del Gobierno de PSOE y Sumar en el Congreso de los Diputados no dejan de mostrarse día tras día ante la dura aritmética que les obliga a pactar iniciativas parlamentarias con partidos de centroderecha como PNV y Junts que, en muchos casos, tienen intereses contrapuestos a los suyos.

La tranquilidad de Feijóo

Ante esta situación en el seno del PSOE, Feijóo acude a Valladolid en un momento de tranquilidad y fortaleza para el PP, a sabiendas del desgaste y las divisiones internas de su principal rival electoral y con la clara intención de contraprogramar el Congreso de los socialistas y presentar la comparación del estado de ambos partidos.

El presidente del PP tratará de presentar a su formación como un "partido de Estado" frente a un "Gobierno débil" y a un PSOE profundamenta erosionado, y aprovechará la Intermunicipal de Valladolid para exhibir su poder territorial, uno de los principales activos de los populares.

Todos los alcaldes populares de España, además de los concejales y presidentes de las diputaciones provinciales y cabildos, están llamados a un cónclave vallisoletano en el que estarán presentes, además del propio Feijóo, dirigentes como la secretaria general, Cuca Gamarra, o el vicesecretario de Política Autonómica, Elías Bendodo.

Después de la Semana del Municipalismo, que está llevando a los populares a lo largo y ancho de las nueve provincias de la Comunidad de lunes a jueves para tratar asuntos como el reto demográfico, el viernes se presentará en un acto en Valladolid la Intermunicipal del fin de semana, como acto previo al cónclave.

Finalmente, el sábado, en la Feria de Muestras de Valladolid y en horario de mañana y tarde, tendrán lugar las principales intervenciones de los dirigentes y regidores populares, mientras que el domingo al mediodía se clausurará la Intermunicipal tras una jornada con intervenciones solo por la mañana.

El cónclave será clausurado el domingo a mediodía por Feijóo y por el presidente del PP de Castilla y León y del Gobierno autonómico, Alfonso Fernández Mañueco, después de unas jornadas en las que habrá participación ciudadana ya que podrán realizarse preguntas a los regidores.

Además, en la Intermunicipal de este fin de semana, los populares rendirán homenaje a los afectados por la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) y a los profesionales y voluntarios que han trabajado para que la vida retornase a la normalidad en las localidades más damnificadas, especialmente en Valencia.

La secretaria general del PP, Cuca Gamarra, anunció el pasado lunes que Feijóo defenderá "la igualdad de los servicios públicos frente a la financiación privilegiada de Sánchez" en la cumbre de Valladolid y también la necesidad "de que el transporte urbano no se reduzca y condene a los municipios".

"Hablaremos de despoblación, de conciliación, de seguridad, de vivienda a lo largo de toda esta semana", señaló, añadiendo que abordarán también las medidas que los populares están impulsando para que "en cada pueblo, por pequeño que sea, se viva mejor y se acceda a los servicios públicos".

"Que nadie tenga que renunciar a vivir en su pueblo porque las oportunidades no existen", añadió Gamarra. Un esperado cónclave que convertirá Valladolid en el contrapeso popular de un Congreso Federal del PSOE en Sevilla que se prevé movido y especialmente tensionado.

Una delegación dividida en Sevilla

Mientras el PP celebra su Intermunicipal en Valladolid, el PSCyL enviará a una dividida delegación de 59 miembros al Congreso Federal de Sevilla. Especialmente tensa será la relación entre los dirigentes autonómicos que acuden al cónclave y los miembros del PSOE de León, abiertamente contrarios a Tudanca.

El Congreso Federal del PSOE estará presidido por el sevillano Juan Espadas y contará con 1.099 delegados, de los cuales 268 proceden de Andalucía, la federación que más aporta, seguida de la Comunidad Valenciana (115), Madrid (89) y Cataluña (86).

A continuación, figuran Castilla-La Mancha (72), Galicia (64), Extremadura (60), Castilla y León (59), Asturias (46), Canarias y Aragón (45), Murcia (34), País Vasco (31), Cantabria (19), Navarra (nueve), La Rioja (ocho) y Ceuta y Melilla (dos).

La delegación en América tiene reservadas cinco plazas y la de Europa tres. Por último, las Juventudes Socialistas cuentan con 22 delegados, de los que ninguno procede de Castilla y León.

Además, son miembros del Congreso Federal, con voz pero sin voto, los integrantes de la Comisión Ejecutiva Federal, que en el caso de Castilla y León son la portavoz Esther Peña, los ministros Óscar Puente y Ana Redondo y la eurodiputada Iratxe García.

También el secretario de Acción Electoral del PSOE, Javier Izquierdo y la responsable de Educación y Formación Profesional, Mariluz Martínez Seijo.

En cuanto a la delegación autonómica, Luis Tudanca acudirá como delegado y cabeza de lista por Burgos, la secretaria de Organización del PSCyL, Ana Sánchez, por Zamora, y Virginia Barcones, directora general de Protección Civil, por Soria.

El PSOE de Soria estará representado por el alcalde de la capital, Carlos Martínez, la apuesta de Ferraz para dirigir el partido, y los socialistas vallisoletanos por la viceportavoz en las Cortes, Patricia Gómez Urbán, que se ha mostrado fiel a Sánchez en su pugna con Tudanca.

El PSOE de León, el más crítico con el dirigente burgalés, enviará 21 delegados, con el diputado Javier Alfonso Cendón, hombre de confianza de Sánchez, al frente, mientras que la delegación palentina estará dirigida por la alcaldesa de Palencia, Miriam Andrés, leal a Tudanca, y enviará cuatro delegados.

El diputado David Serrada encabezará la delegación salmantina, con cinco representantes, el también representante en el Congreso Antidio Fagúndez la zamorana, con tres, el senador Jesús Caro la abulense, con seis y el diputado José Luis Aceves la segoviana, con cuatro delegados.

Un fin de semana de exhibición de fuerza para los dos principales partidos de España, con Valladolid y Sevilla como epicentros y con un Feijóo que tratará de poner frente al espejo las debilidades y tensiones internas del PSOE en un momento crítico para el partido y para el Gobierno de España.

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