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El juicio con jurado popular por el asesinato de Paloma y su hija India, de solo 8 años, a manos, presuntamente, del que era su compañero sentimental, David M, comenzará este 11 de diciembre de 2024 en la Audiencia de Valladolid, como apunta el escrito de la Fiscalía al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL de Castilla y León.

El juicio está señalado también para los días 12, 13 y 16 más lo que tarde el jurado en emitir el veredicto aunque el calendario está sujeto a modificaciones en función de cómo se desarrolle la sesión.

La Fiscalía de Valladolid, las tres acusaciones particulares y la popular, que ejerce la Asociación Clara Campoamor, solicitan para el acusado una pena de prisión de 25 años de cárcel por el asesinato a cuchilladas en enero de 2023 de su pareja, Paloma, y prisión permanente revisable por el asesinato de India, de 8 años.

Sin embargo, la defensa del acusado, en su escrito de calificación, solicita una condena global de 25 años de prisión al tipificar ambas muertes como delitos de homicidio, con la eximente incompleta que viene derivada de la ingesta involuntaria de sustancias suministradas por terceros. Pide 12 años de cárcel por la muerte de Paloma y 13 por la de India.

Los brutales hechos

El doble crimen se produjo en la madrugada del 23 de enero del año 2023, como apunta el escrito de la Fiscalía, en un quinto ubicado en el número 66 del Paseo de Zorrilla de la ciudad del Pisuerga.

El escrito de Fiscalía señala que David, el acusado, inició una relación sentimental con Paloma, comenzando, unos meses después a convivir en la vivienda de Paloma en el centro de Valladolid. Con India, la hija de

El 22 de enero de 2023, David “llevó a su hijo a la localidad de Medina del Campo” para “jugar un partido de fútbol”. Una vez que reintegró al menor en el domicilio materno permaneció en Valladolid.

El escrito de acusación de la Fiscalía apunta que David se trasladó a La Cistérniga donde estuvo tomando unas consumiciones. Una vez en Valladolid siguieron tomando en el barrio de La Rondilla.

En torno a las 00.17 el acusado regresó al citado domicilio familiar donde convivía con Paloma e India.

Tras varias llamadas y después de acceder al domicilio, Paloma y David se dirigieron a la cocina. En un momento determinado, se inició una discusión y el acusado “cogió de la cocina un cuchillo metálico de grandes dimensiones (32 centímetros de longitud y 20 de hoja) y de forma sorpresiva y con ánimo “de acabar con su vida comenzó a propinarle múltiples puñaladas”.

Paloma llegó a intentar salir a intentar salir de la cocina, pero el acusado “la acorraló en la esquina de la pared izquierda junto a un radiador impidiendo que pudiese salir, llegando a agarrarse al radiador durante el ataque”.

Le causó heridas mortales. Paloma sufrió además múltiples heridas incisas en las manos y los antebrazos al intentar cubrirse, así como lesiones por presión en los labios. David mandó entonces un WhatsApp a la 1.30 horas al teléfono de su exmujer diciéndole “la culpa es tuya. Estas son las consecuencias”.

Debido a la discusión y a los gritos, India salió de su habitación y corrió en busca de un teléfono para hacer una llamada al 112 de 7 segundos que se registró a las 1.35 horas.

Percatado de ello, el acusado, y portando otro cuchillo diferente al antes utilizado, se dirigió al salón para evitar que la niña lograra alertar telefónicamente de lo sucedido y una vez allí, cuando India se encontraba en un sofá del salón, le arrebató el teléfono con el que la pequeña había logrado hacer otras dos llamadas.

David se lanzó a propinar varias puñaladas que acabaron también con la vida de la menor. Dejó el cuchillo con el que había atacado a la meno en el sueño.

A las 3.15 horas, miembros de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana acudieron a la vivienda, estando cerrada sin poder entrar, teniendo que acceder por la ventana los Bomberos.

El escrito de la Fiscalía apunta que David “es una persona con antecedentes de consumo continuados de alcohol, cocaína y anfetaminas” pero que “no padecía en el momento de los hechos, ninguna patología mental que le alterase su capacidad intelectiva o volitiva y por tanto su imputabilidad”.

Añade, además, que “no existen datos objetivos de consumo de sustancias el día de los hechos, no estando acreditado por tanto que tuviese afectadas sus facultades mentales”.

El acusado se encuentra en situación de prisión provisional desde el 26 de enero de 2021.

La Fiscalía apunta que los hechos son constitutivos de un delito de asesinato con alevosía en el caso de Paloma y otro sobre India.

Por el asesinato de Paloma, el Ministerio Fiscal solicita 25 años de prisión y por el de India, prisión permanente revisable.