Entre Valladolid capital y la conocida como Villa de Olmedo, a orillas del río Cega, nos encontramos con Mojados, un municipio pucelano que está decorado con un bello paisaje de bosques pinariegos que rompen con la estética propia de la provincia.
Cabe destacar que la localidad vallisoletana fue Villa Realenga enraizada en la Edad Media castellana y leonesa y después, Villa del Señorío Episcopal de la Mitra de Segovia y que cuenta con un amplio conjunto histórico en el que destacan dos iglesias, la de San Juan y la de Santa María de la Asunción.
Mojados cuenta en la actualidad, y según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) con una población de 3.331 habitantes que vive la Navidad de la mejor de las maneras. Este periódico, el pasado viernes, les presentaba toda su programación navideña.
La Cabalgata de Reyes Magos es, sin lugar a dudas, la cita principal en el pueblo pucelano, aunque la visita del cartero real también brilla en el lugar.
Un lugar que va a contar, otro año más, con un árbol de Navidad que tiene una gran historia digna de contar y que ha movilizado a los vecinos del lugar con un claro mensaje en unas fechas tan especiales.
“En nuestro pueblo hemos continuado con la tradición de crear un árbol de Navidad reciclado, reafirmando nuestro compromiso con el medio ambiente y la creatividad. Este año, nuestro árbol está hecho con latas de refresco y cerveza. Es una evolución del anterior, con botellas de plástico y que nos acompañó tres años”, asegura Victoria Paunero.
Imagen del imponente árbol de Mojados
Ella es la concejala de Servicios Sociales y Medio Ambiente en Mojados y confiesa, en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León que “la estructura del árbol sigue siendo la misma” pero que se ha “renovado la decoración con 5.400 latas” para “llegar a los 9 metros de altura”.
“Esta obra de arte reciclada se puede contemplar en pleno casco antiguo de Mojados, a la salida de la Iglesia de San Juan. Quiero agradecer la colaboración ciudadana. Mucha gente ha llevado las latas a los establecimientos indicados y un grupo de mujeres han convertido en realidad esta joya”, indica la edil.
Con un toque de luz, este árbol crea un ambiente espectacular que culmina con una estrella que está hecha con chapas de refresco convirtiendo al protagonista en una obra digna de ver, tanto de día, como de noche.
“No sólo embellece el centro de nuestro pueblo, sino que concienciamos a la comunidad sobre la importancia del reciclaje y la sostenibilidad”, asegura la concejala de Servicios Sociales y Medio Ambiente en Mojados.
Un árbol reciclado que simboliza el espíritu navideño de Mojados y su amor por el planeta y que recuerda que, con un poco de imaginación, podemos dar una segunda vida a los materiales que se desechan.