El vigésimo quinto aniversario de la coronación canónica de la Virgen de la Concha se ha visto deslucido esta mañana tras suspenderse uno de los actos centrales de la conmemoración. La procesión que iba a devolver a la virgen a la iglesia de San Vicente ha tenido que ser suspendida ante la previsión de lluvia, puesto que podría dañar a la imagen que ha sido restaurada recientemente.

A pesar del contratiempo, la Cofradía de San Antolín o de la Concha ha celebrado, al igual que en su coronación en 1992, un Solemne Pontifical en la Catedral. Una celebración litúrgica que ha estado presidida por el obispo D. Gregorio Martínez Sacristán, con la Virgen de la Concha ubicada en el presbiterio de la Catedral, recordando su coronación.

Por otro lado, aunque el regreso de la Virgen de la Concha en procesión no ha podido ser posible, la Catedral se ha inundado de ese sentimiento festivo con música para los fieles y hermanos de la cofradía allí presentes.

De forma extraordinaria la cofradía celebrará esta tarde y mañana por la mañana un besamanos a la Virgen de la Concha y besapié al Niño Jesús como cierre a los actos, teniendo una jornada de acción de gracias por los veinticinco años de reconocimiento de la devoción de la Virgen.