Tradición a golpe de burro, cencerros y roscas de San Antón
Una tradición que se mantiene desde los años sesenta. El Día de San Antón en Zamora es tradición la bendición de los animales pero también el paso de la Cofradía del Cencerro por las calles de la capital en símbolo de animación, diversión y jolgorio.
Eran las siete y media de la tarde y la comitiva, o los más conocidos como 'hermanos burros' emprendían su particular procesión desde la Plaza Alemania. Así, por las calles céntricas de la ciudad, decenas de miembros de la cofradía, acompañados de amigos y familiares, amenizaban las vías de Zamora a golpe de dulzaina, cencerros y las tradicionales roscas de San Antón que entragaban a los viandantes.
Además, realizando las correspondientes paradas en los establecimientos hosteleros como manda la tradición, la Cofradía del Cencerro llegó con mucho ambiente a la Plaza Mayor para poco después, degustar la famosa 'pesebrada' en un céntrico restaurante de la capital y finalizar así este día festivo de San Antón.