Carlos Árevalo se fue de Zamora para triunfar en el mundo de la comunicación y así lo hizo cuando aterrizó en Las Mañana de Cuatro. La vida da muchas vueltas pero él más y, tras mucho rodaje y trabajo tanto dentro como fuera del teatro, aterriza momentáneamente en su ciudad natal para presentar un nuevo montaje teatral, 'Orgullo Nacional'.

Tras 'Voto en B', su primera obra de humor político, y el estreno de su segunda obra en el Word Pride 2017 de Madrid, Carlos y su equipo pasan el próximo 23 de Junio en el Teatro Principal, algo que él mismo considera un "verdadero orgullo". Las entradas están disponibles tanto en taquilla como en la web del teatro.

Hoy, Carlos nos dedica unas palabras para conocer mejor a este zamorano sinónimo de aventura y positivismo.

¿Cómo llega un zamorano de estar en Las Mañanas de Cuatro a dirigir su propia obra de teatro?

Siempre he querido dedicarme al mundo del periodismo así que tuve que mudarme a Madrid para estudiar Comunicación Audiovisual y allí me quedé. Hace ya doce años que empecé a trabajar en televisión como redactor para diferentes programas de Cuatro, Telecinco y Antena 3. El último, Las Mañanas de Cuatro, en el que trabajaba como coordinador de contenidos y que, tras ocho temporadas, ha apagado las cámaras el pasado 14 de marzo siendo líderes del canal de Mediaset. Este programa me permitió compaginar el trabajo con volver a estudiar, esta vez interpretación, una de esas asignaturas pendientes que tenía aparcada por falta de tiempo pero a la que desde pequeño quería dedicarme: actuar para comunicar. Hace dos años y medio surgió la oportunidad de presentarme a un concurso de guion teatral y, a partir de ahí, surgió la primera de las obras, 'Voto en B', una comedia electoral que estuvo en la cartelera de Madrid durante seis meses. Hace justo un año llegó la segunda, 'Orgullo Nacional', que estrenamos durante el World Pride de Madrid de 2017 por su temática LGTB. Y aquí estamos un año después, en Zamora, para representarla en mi ciudad. Eso sí que es un verdadero orgullo, el poder venir a tu tierra a actuar.

En 'Orgullo nacional' vemos a la dueña de una mercería de fuertes creencias celebrar el 12 de octubre nada menos que con una limpiadora yayoflauta, una diseñadora de bragas y un virgen proveedor de ropa interior. El conflicto está servido, ¿no?

Servido sin censuras de ningún tipo. Las encargadas de hacerlo son Charo Badajoz, Encarna Hernando, Blanca Gana y yo mismo, un elenco que representa las principales fuerzas políticas de nuestro país con posiciones claramente enfrentadas respecto a los distintos problemas que vivimos como sociedad. En esta comedia erótico-festiva multicolor se van a destapar las vergüenzas de nuestra política. Queremos ser críticos y seguir apostando por la igualdad y libertad de expresión, que en los últimos tiempos se está viendo muy afectada, y lo hacemos con un texto que cuenta con 200 referencias políticas, todo lo que se representa en la obra, ha ocurrido a nuestros parlamentarios. Podríamos decir que una gran parte del guion está escrita por los líderes de las principales fuerzas políticas, todos ellos grandes cómicos en su oratoria. Además una parte del texto tiene referencias a nuestra tierra y a sus políticos, que desde hace unos años han conseguido crear titulares a nivel nacional para lo bueno y para lo malo. De hecho, esta obra no debería perdérsela ningún político de Zamora. Sería una buena ocasión para que se reencontraran, por ejemplo, Valdeón y Maíllo.

¿Cómo afecta la actualidad política a una obra tan apegada a la realidad de España?

El guión nunca es igual, ya que el texto va actualizándose cada semana con los acontecimientos políticos que van sucediendo y que últimamente no son pocos.
La idea de crear 'Orgullo Nacional' surge de querer plasmar la tradición de nuestras fiestas populares vistas desde el lado cómico y llevarlas a la utilización política, pero esta es una obra que ha ido creciendo con los acontecimientos que han ido sucediendo en nuestro país, con la celebración del referéndum, la utilización de banderas, la corrupción, moción de censura, el movimiento feministas, la preocupación por las pensiones... Los aspectos más relevantes de ellos últimos tiempos se recopilan en la obra.

¿Es difícil plasmar en comedia algo que afecta tanto  a la vida diaria como la convulsión política en nuestro país?

Los actores ya habíamos trabajado juntos en un proyecto anterior, Voto en B, por lo que era más fácil el volver a plantear una nueva obra. El llevar ya 2 años trabajando juntos ayuda a crear un clima de confianza que es necesario para trasmitir buen rollo al público y que se vaya con la sensación de haber disfrutado de lo que han visto. Después de un año con la obra y muchas actualizaciones de guion, tenemos una última representación en Madrid para el Orgullo Gay y nos daremos un descanso a la espera de ver cómo evoluciona la situación política. Aunque como siempre prometemos volver a los escenarios para seguir sacando carcajadas al público.

¿Es necesario aplicar el humor a la situación de incertidumbre que vive España entre el conflicto catalán y el nuevo gobierno socialista?

Reírse siempre es bueno. Si no aplicáramos el humor a la política en numerosas ocasiones, estaríamos todo el día con las manos en la cabeza. Hay que darle tiempo y mucho diálogo a la situación que estamos viendo. Nosotros venimos dispuestos a hacer reír al público del Teatro Principal de Zamora el próximo 23 junio.

Como reza la presentación de la obra, ¿tú qué estarías dispuesto a hacer por orgullo?

En numerosas ocasiones las personas dejan de vivir su propia vida por el qué dirán, por creencias religiosas o convicciones políticas. Pero en la vida hay que dejar a un lado las banderas establecidas para elegir nuestros propios colores y poder pintar la nuestra. Por orgullo estaría dispuesto a ser políticamente incorrecto pero la verdad es que nadie sabe qué podríamos llegar a hacer por orgullo.

¿Cuál es el mensaje qué quiere dar la obra?

Cada uno somos de un padre y una madre y eso nos hace diferentes. 'Orgullo Nacional' representa eso, la riqueza cultural que tenemos en nuestro país gracias a la calidad de los habitantes tan diferentes que habitan en él. Ese es el verdadero orgullo nacional, el de las personas que han luchado, luchan y lucharán porque todos tengamos los mismos derechos, independientemente del sexo, raza o condición sexual. Nosotros lo pasamos tan bien, tan bien... nos reímos tanto en los ensayos y en el escenario que es lo que realmente queremos trasmitir. Queremos que la gente venga a darle alegría al cuerpo y risas al alma y que cada uno recoja el mensaje que quiera.

¿Y qué mensaje te han enseñado a ti 'Orgullo Nacional' y el público?

No deja de sorprenderme la obra o, más bien, los acontecimientos políticos que están sucediendo en los últimos tiempos. La realidad siempre termina superando a la ficción, pero política no todo debería valer. Al final, el público siempre es inteligente y saber leer entre líneas y no sentirse ofendido por las situaciones o comentarios que puedan suceder en la obra. El mensaje que siempre nos transmiten es el de tolerancia.

¿Qué futuro tiene 'Orgullo Nacional'?

Después de un año con la obra y muchas actualizaciones de guion, tenemos una última representación en Madrid para el Orgullo Gay y nos daremos un descanso a la espera de ver cómo evoluciona la situación política. Aunque como siempre prometemos volver a los escenarios para seguir sacando carcajadas al público.