La Junta de Seguridad Local del Ayuntamiento de Zamora ha dado por zanjada en su reunión de esta mañana la polémica con el botellón de San Martín en la noche de Jueves Santo. "Los botellones están prohibidos", ha subrayado el alcalde, Francisco Guarido, quien ha subrayado que el Ayuntamiento extremará las medidas de prevención pues que "previsiblemente" se repetirá la situación de otros años, en los que miles de jóvenes se han concentrado en este bello emplazamiento a los pies de la muralla de la ciudad, como vienen haciéndolo desde hace muchos años. Así, se vigilará el consumo de alcohol en menores, se instalarán urinarios públicos ante la gran afluencia no solo en esa noche, sino en toda la Semana Santa, y los servicios de limpieza actuarán con rapidez para sanear la zona. Asimismo, permanecerá vallada la parte de la muralla donde se han producido desprendimientos y la que ha determinado la arquitecta municipal como zona de riesgo, y se acordonará la escultura de Coomonte instalada la semana pasada para evitar destrozos.
Sobre la propuesta del concejal de Seguridad Ciudadana de celebrar una fiesta disuasoria en la zona de la Ciudad Deportiva, "se ha valorado y se ha descartado", ha resuelto escuetamente el alcalde.
La Junta de Seguridad Local se ha reunido esta mañana en el Ayuntamiento con el fin de coordinar las actuaciones en materia de seguridad de cara a la próxima Semana Santa. La sesión estuvo presidida por el alcalde de Zamora, Francisco Guarido, y contó con la asistencia del subdelegado del Gobierno, Ángel Blanco, el concejal de Seguridad Ciudadana, Antidio Fagúndez, y los representantes de los distintos servicios de seguridad y atención ciudadana en la capital y provincia como Guardia Civil, Policía Nacional, Policía Municipal, Bomberos, Protección Civil o Cruz Roja.
El objetivo fundamental de esta reunión es que haya un nivel de coordinación suficiente entre los organismo implicados, que "estén a punto" todos los medios públicos para garantizar la convivencia de todos los vecinos y visitantes que acuden a nuestra ciudad en esas fechas y que no haya incidentes de gravedad. En referencia a la posible convocatoria a través de redes sociales de un "botellón" la noche del Jueves Santo en el parque de San Martín, el alcalde aseguró ser consciente de las molestias que pueden originar estas concentraciones de jóvenes especialmente a los vecinos del Casco Antiguo y a la propia Semana Santa. A este respecto Guarido hace un llamamiento a la colaboración, el respeto y la convivencia pacífica, "para que todos podamos disfrutar de la Semana Santa tanto los zamoranos como los muchos turistas que nos visitan en esas fechas".
No obstante para evitar posibles incidencias se reforzará el operativo de vigilancia y control, con una mayor presencia de fuerzas de seguridad en la zona, y como medida de protección de de la Muralla se ha acordonado un tramo de unos 20 metros en la esquina de la bajada de San Martín que incluye también la protección de la estatua "Equilibrio horizontal" de Coomonte. Por otra parte Cruz Roja instalará un puesto de socorro y primeros auxilios en San Martín desde donde este año se intensificará la información y se prestará una especial atención al problema de la violencia de género.
Tanto el alcalde como el subdelegado del Gobierno aseguraron que el principal esfuerzo se centrará en la prevención y que tanto la Policía Municipal como los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado estarán atentas a cualquier incidencia que se pueda producir para minimizar los efectos y molestias que se puedan generar a los ciudadanos, ya que no se puede prohibir algo que nadie ha convocado, al tiempo que se recordó la prohibición de consumir alcohol en la vía pública. El subdelegado del Gobierno manifestó que el objetivo es garantizar el mantenimiento del orden público y la seguridad ciudadana, y anunció que por parte de la Guardia Civil se llevarán a cabo controles de alcoholemia y drogas en las principales vías de acceso a la ciudad.