Si hace unas semanas las cámaras de televisión se hacían eco de las impresionantes calabazas del fermosellano Manuel Ramos, parece que este fenómeno hortícola es más habitual de lo que parece en Fermoselle. Y es que, el también vecino de la localidad, Raimundo Santos López guarda con orgullo en su garaje dos impresionantes calabazas de casi 100 kilos cada una.

Este hombre narraba hoy mismo a NOTICIASCYL la dificultad de traer desde su huerta tan inmensos frutos, ya que para su transporte ha necesitado la ayuda de tres familiares, que con mantas y entre todos lograban mover hasta su casa la gigantescas calabazas.

¿Qué tendrá esta tierra de los Arribes del Duero para que sea tan habitual la proliferación de estas enormes verduras? Habrá que descubrirlo...