Las bajas temperaturas y la niebla han vuelto a dejar una gran cencellada en Zamora cubriendo la capital de una capa de hielo que, por un lado genera complicaciones entre los viandantes y la circulación, pero por otro vuelve a ser la protagonista de espectaculares estampas.
La alerta amarilla en la que de nuevo está inmersa la meseta de Zamora por nieblas engelantes se mantendrá hasta las 12:00 horas de este mediodía con visibilidad reducida de unos 100 metros, si bien vuelven a ser engelantes y ya han dado lugar a cencelladas.
La ciudad permanece blanca y los -3ºC alcanzados ya han dejado fuentes congeladas, como es el caso de la fuente de La Marina, que amanecía esta mañana totalmente cubierta por una capa de hielo.